Un obispo de la república centroafricana asegura que las parroquias católicas están “llenas de musulmanes”


El obispo de Bangassou, diócesis del sur de la República Centroafricana, Juan José Aguirre, ha afirmado que “las iglesias cristianas están abarrotadas de musulmanes buscando refugio” y negó que los católicos, como grupo organizado, participen en la violencia que vive la zona.
Según Aguirre, esa población no católica vive en las parroquias y en las misiones cristianas, está acogida por los cristianos. “Los cristianos están viviendo con horror, con un gran dolor toda esta muerte violenta de musulmanes”, agregó en declaraciones a Ayuda a la Iglesia Necesitada recogidas por Servimedia.
El prelado desmintió rotundamente que en la República Centroafricana los cristianos estén provocando matanzas contra los musulmanes, tal y como se publica en diferentes medios de comunicación en España. “No hay milicias cristianas matando a musulmanes en la República Centroafricana”, aseguró.
Sí confirmó que las milicias “Anti-balaka (antimachetes) están sembrado el terror en la RCA”, pero se trata de “un grupo de personas de autodefensa que fueron traumáticamente machacados, pisoteados, robados e incluso víctimas de asesinatos por parte los Seleka desde hace más de un año”.
Ahora que los terroristas de Seleka (brazo armado de Al Qaeda) están debilitados y desarmados, estos grupos Anti-balaka “han desplegado su ira, su odio, se han revuelto contra el daño horrible que hicieron los Seleka contra todos aquellos musulmanes que no hicieron nada contra los Seleka en su momento y que entendieron que fueron cómplices”.
“Pero de ninguna manera podemos decir que los Anti-balaka es un grupo cristiano. Los Anti-balaka están formados por gente muy variada y terriblemente exaltada, entre ellos los que nosotros llamamos ‘los desheredados’: bandidos, ex presos, delincuentes y criminales que se han integrado en este grupo y se están extendiendo como una plaga de langostas por toda la República Centroafricana matando musulmanes”, añadió.
Aguirre agregó que “si hay cristianos en los Anti-balaka son una minoría de jóvenes histéricos que se han rebelado contra los Seleka, pero las comunidades cristianas en absoluto, de ninguna de las maneras, están allí realizando esta violencia contra los musulmanes”.
“La Iglesia católica en la República Centroafricana quiere el perdón, que se pase página, quiere y busca la reconciliación, no quiere ni venganza ni más violencia”, insistió el obispo.
El problema, en su opinión, está en que Francia no intervino hace un año cuando llegaron los terroristas de Seleka arrasando el país y nos les frenaron en su momento. Ahora, añadió, si consiguen parar y desarmar a los Anti-balaka “es muy probable que estos bandidos se escondan en la selva y se conviertan en asaltantes de camino, un peligro enorme para la población del país”.

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