Unicef alerta de la propagación de un brote de cólera en malawi

Unicef Malawi anunció este viernes que está en alerta máxima por un brote de cólera en las zonas fronterizas del sur del país, donde se encuentran localizados los campos de desplazados por las inundaciones de los últimos meses, que continúan altamente poblados.

En un comunicado, la organización señala que en los últimos dos meses el ministerio de Salud de Malawi ha confirmado 39 casos de cólera y dos muertes. En este momento, la preocupación principal es que la rápida propagación de la infección pueda generar a un brote aún mayor que los servicios de salud, ya saturados, no puedan contener.
Asimismo, Unicef señala que es alarmante la información que llega desde Mozambique (que comparte frontera con Malawi), donde se registraron más de 3.400 casos de cólera y 37 muertes desde el 25 de diciembre, muchos de ellos en niños.
Pese a que los síntomas en los afectados por cólera pueden ser mínimos o no revelarse al principio, pueden contribuir a la expansión de la enfermedad. Después de la infección, los pacientes experimentan diarrea, vómitos y, en fases avanzadas, deshidratación grave. En este sentido, si no son debidamente tratados, el cólera puede ser mortal en unas horas, y es especialmente peligroso para los niños más pequeños.
El representante de Unicef en Malawi, Mahimbo Mdoe, señala que “como agentes humanitarios en Malawi, debemos movernos rápidamente para frenar la propagación de esta enfermedad”.
“Estas poblaciones desplazadas son extremadamente vulnerables, particularmente aquellas con baja inmunidad, como los niños con desnutrición. Unicef está trabajando para apoyar al gobierno mediante servicios itinerantes de salud, saneamiento e higiene y agua potable”, destacó.
PROBLEMA DE SALUD PÚBLICA
El cólera constituye un problema grave de salud pública para las personas en entornos superpoblados, con recursos de agua y saneamiento inadecuados. Aunque el cólera es endémico en Malawi, no se había informado de casos en los últimos tres años. La última vez que el país sufrió un brote a gran escala fue en 2009, cuando más de 1000 personas contrajeron la enfermedad.
El jefe de salud de Unicef, Kyaw Aung, afirma que desde el principio se han realizado esfuerzos ante un posible brote. “Unicef ha enviado equipamiento de protección, 30 camas para cólera, 15 tiendas de aislamiento, medicación, fluidos por vía intravenosa y 1.450 botellas de cloro”, dijo.
“Además, se ha aliado con agentes gubernamentales y no gubernamentales, incluyendo MSF, Goal Malawi y Cruz Roja, para implementar servicios de salud, educación sanitaria sobre cólera, y promover la higiene dentro de los campos”, concluyó.