El peligro de los cigarrillos electrónicos: dos muertes en EEUU asociadas a su uso

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La posible segunda muerte en Estados Unidos vinculada al cigarrillo electrónico, la de un hombre que falleció en julio, es investigada por la agencia estatal de Salud de Oregón (OHA, por sus siglas en inglés), según sus responsables.

"Todavía no conocemos la causa exacta de estas enfermedades, si son causadas por contaminantes, ingredientes en el líquido o algo más", señaló en un comunicado fechado el martes la doctora de la División de Salud Pública de OHA Ann Thomas.

La agencia afirma que los síntomas del fallecido en julio coincidían con los de más de 200 casos similares en un grupo nacional de enfermedades respiratorias, que afecta principalmente a adolescentes y adultos jóvenes en al menos 25 estados del país.

La muerte se produjo menos de dos semanas después de que los funcionarios de Salud de Illinois indicaran, en agosto pasado, que un paciente que contrajo una enfermedad pulmonar grave murió después de vapear un cigarrillo electrónico. El fallecido de Oregón había usado un cigarrillo electrónico o dispositivo de vapeo que contenía cannabis comprado en un dispensario de cannabis, detalla el comunicado.

El peligro de vapear

Hace años, en el momento en que los cigarrillos electrónicos aparecieron por primera vez en las tiendas, se comercializaron con el pretexto de servir de ayuda a todos aquellos fumadores que querían dejar un hábito potencialmente mortal. 

En 2018, la marca Juul se hizo cargo de las tres cuartas partes del mercado de cigarrillos electrónicos de Estados Unidos. Entonces, el target pasó a ser los jóvenes no fumadores.

Según explica el medio Vox.com, Maciej Goniewicz -uno de los principales investigadores de cigarrillos electrónicos- está, junto a otros, tratando de descubrir el impacto que podría tener este hábito en el cuerpo a largo plazo. 

Eso sí, antes de nada matizar que los cigarrillos electrónicos siguen siendo más seguros que los normales, según los expertos. 

Riesgo de convulsiones

Los cigarrillos electrónicos contienen un líquido de sabores y otros productos químicos y a menudo nicotina. Por ejemplo, los de Juul contienen altas dosis de este último componente.

Durante la última década, ha habido al menos 35 informes de convulsiones -trastornos repentinos e incontrolados en el cerebro- después del uso de cigarrillos electrónicos. "Pueden no parecer mucho en comparación con el número total de personas que vapean, pero sí que existe cierta preocupación en torno a esto", explicó el ex director de la Administración de Alimentos y Medicamentos de EEUU (FDA, por sus siglas en inglés). 

Los investigadores son conscientes desde hace tiempo que las convulsiones pueden ser un efecto secundario por el envenenamiento por nicotina. 

Sistema cardiovascular

"La nicotina en los cigarrillos electrónicos hace lo mismo que los normales", explicó a Vox, Neal Benowitz, profesor de medicina en la Universidad de California en San Francisco. 

Esto supone que es posible que aumente la adenalina que circula en nuestros cuerpos lo que activaría el sistema nervioso simpático (nuestra respuesta de 'lucha o huida), elevando la presión arterial y acelerando la frecuencia cardíaca. 

Además, el elemento calefactor en los cigarrillos electrónicos emite pequeñas partículas, a veces incluso metales, que pueden alojarse profundamente en los pulmones y ser absorbidas por el sistema circulatorio del cuerpo.

Riesgo de explosión

Un estudio del New England Journal of Medicine expuso el caso de un adolescente de 17 años de Nevada que apareció en la sala de emergencias después de que un cigarrillo electrónico explotase en su boca.

Según el New York Times, los médicos sostenían que fue la batería del dispositivo la que causó la explosión. Según la FDA, pese a que esto sea poco frecuente, puede causar lesiones graves. Un análisis, estimó que hubo 2.035 lesiones por explosión y quemaduras de cigarrillos electrónicos en Estados Unidos entre 2015 y 2017. 

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