Violencia género. El pp pide incluir a los hijos de las maltratadas como sujetos en la ley integral

La diputada del Grupo Popular en el Congreso Susana Camarero defendió este martes ante el pleno una Proposición de Ley para incluir a los hijos de víctimas de violencia de género en el artículo 1 de la ley integral de 2004, a fin de “convertirlos en sujetos de derechos y en objetos directos de protección” igual que sus madres.
En su intervención, Camarero señaló que aunque la ley contra la Violencia de Género aborda el tema de los menores en su preámbulo, apenas se ocupa de ellos en el articulado”.
A su juicio, los menores víctimas de esta lacra “son los grandes olvidados de este gobierno”, que ha actuado de manera “inmovilista e ineficiente” en relación a la violencia de género.
La proposición de Ley pide además modificar los artículos 173.2 del Código Penal y el 544 ter de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, a fin de suspender la patria potestad (durante un período de 1 a 5 años) para los agresores ya condenados y retirar de urgencia y de forma cautelar la custodia dentro de la orden de protección.
“No entendemos el inmovilismo del gobierno” en cuanto a los menores, que se niega “a incorporarlos como objeto de protección”, afirmó Camarero, qien pidió “dar entrada en la ley a los hijos de las maltratadas” a fin de asegurar sus derechos”.
Todo el mundo entiende que la violencia de género afecta fundamentalmente a las mujeres, con lo que la inclusión de los hijos no afectará el espíritu de esta ley”, agregó.
EL RESTO SE OPONE
La izquierda parlamentaria calificó en cambio esta propuesta como un intento de “modificar la ley” y de dar marcha atrás en su espíritu y objeto fundamental.
En nombre del Grupo Mixto, la diputada del BNG Olaya Fernández Dávila afirmó que “la incorporación de los hijos en el artículo 1 viene a desvirtuar el objetivo de la norma”.
“Reconocer que la violencia de género obedece a la situación de desigualdad entre hombres y mujeres fue un paso tan importante que no entendemos este intento de mezclarlo y desvirtuarlo todo”, señaló.
La misma idea expresó el diputado de Esquerra Republicana Joan Tarda, quien agradeció al PP “por avisarnos de que si por desgracia llega al gobierno modificará una de las leyes más importantes de la Democracia”, como es la de Violencia de Género.
En opinión de la diputada socialista Antonia García Valls, esta iniciativa obedece a “una concepción ideológica del PP”, y “no a un intento de mejorar la protección de los menores”.
“Desde 2004 el PP viene cuestionando el concepto de violencia de género como fruto de la discriminación de la mujer en una sociedad machista”, y por eso pretende cambiar el objeto de esta ley, apuntó García Valls.
Los representantes de CiU y PNV, Mercè Pigem y Joseba Agirretxea, se mostraron dispuestos a modificar la ley, pero consideraron más apropiada una “norma global de protección de la infancia contra el maltrato infantil”.
Según Aguirretxea, “es más conveniente una legislación para proteger a la infancia de manera global”, y aunque “vemos adecuada la necesidad de garantizar más derechos a los menores, no compartimos la metodología que propone el PP", señaló.
La diputada de CiU anunció por su parte que su grupo se abstendría en la votación, e indicó que la propuesta de los populares olvida temas “tan importantes como el de los matrimonios forzados o el abuso sexual a menores”.
“Por ello es mejor una ley específica” y no modificar ésta, pues conviene dejar claro que “las mujeres son las principales víctimas de la violencia de género”, destacó Pigem.
Finalmente, todos los grupos rechazaron las peticiones de modificación del Código Penal y la Ley de enjuiciamiento Criminal, ya que “es mejor que un juez decida en cada caso”.
Retirar la patria potestad de forma automática podría traer más perjuicios a los menores, señalaron.