Sin nuevas líneas de investigación

Un año sin Yago: "No hay ninguna pista de que esté vivo... ni de lo contrario"

Los familiares de este joven coruñés de 28 años desaparecido cuando regresaba de un festival celta de Ortigueira el pasado 14 de julio vuelven a solicitar la colaboración ciudadana. 

Yago desapareció hace un año
Yago desapareció hace un año
SOS Desaparecidos

"Cualquier dato, cualquier ayuda, es fundamental para los suyos". Es parte del mensaje que el Depor dejó en sus redes sociales un año después de la desaparición de Yago de la Puente Agulló, el joven coruñés de 28 años desaparecido en Ortigueira el pasado 14 de julio. "No hay ningún elemento de prueba que indique que está vivo ni tampoco de lo contrario", denuncia su padre a este medio. Durante todos estos meses sus amigos y familiares no han dejado de barrer la zona donde se le vio por última vez, en la búsqueda de algún indicio sin éxito. Al joven se le perdió la pista en Cerdido y desde entonces "no hay ninguna prueba, ni siquiera ha tocado el dinero de su cuenta corriente. No ha entrado ni en la app del banco". 

El joven llegó hasta la estación de Cerdido "sin móvil ni dinero pero con una mochila de la que tampoco se ha encontrado nada" y allí un testigo que estaba en el andén esperando a su madre lo ubica preguntando por cómo llegar hasta A Coruña en autobús. Para llegar hasta esa estación tenía que andar unos kilómetros "y algunos vecinos de las casas colindantes a las vías también lo ven". Pero ahí es donde se pierde la pista a este joven al que se ha vuelto a recordar esta semana en una concentración donde se han dado las gracias a todos los que colaboran en su búsqueda y con la intención de que su caso no quede en el olvido llegando a más gente, más lejos y "alguien o él mismo, nos dice algo".

Pero lo cierto es que un año después "seguimos en el mismo punto que estábamos con ninguna pista o indicio nuevo que nos diga por donde seguir y es agotador gestionar toda la incertidumbre y la impotencia de no saber qué pasó en la vida de Yago", aseguran unos padres que no se rinden y piden de nuevo toda la colaboración ciudadana para seguir compartiendo la foto de su hijo "para que se sepa que seguimos buscándole, que no ha aparecido ni sabemos nada de él". En declaraciones a los medios la madre asegura que "seguimos sin perder la esperanza de que alguien le vea y nos ayude a encontrarle y pode volverle a ver". 

Ahora mismo el equipo de investigación "ya ha batido infinidad de veces la zona donde se le vio por última vez, incluso voluntarios con perros de caza, y ya no se sabe por donde seguir", ante lo que piden "se sigan buscando nuevas líneas o hipótesis que puedan abrir una luz". Y esta petición la hacen extensible a "todos los desaparecidos que existen en este país. Después de lo vivido creemos que la coordinación y colaboración entre los distintos estamentos tiene que estar mucho más desarrollada y a pesar de la gran voluntad y vocación de las personas implicadas, los medios son escasos", denuncian en la concentración. 

De nuevo se dirigen a su hijo, que había empezado muchas carreras sin acabar ninguna pero acababa de apuntarse a un curso de paisajismo y jardinería, "para seguir pidiendo que si nos escuchas nos digas que estás bien...". Se dirigen a este joven para recordarle que "estamos deseando oír tu voz, abrazarte de nuevo y decirte todo lo que te queremos y echamos de menos". Insisten en que pueda reunir las fuerzas necesarias para "decirnos estoy aquí y estoy bien". De memoria se saben el recorrido que hizo desde que dijera a sus amigos que se iba del festival celta al que fueron en Ortigueira. "Tiene que coger el tren que va a Ferrol y hacer un trasbordo para seguir hasta A Coruña", relata su padre. En Cerdido "hay un cambio de tren pero Yago no lo hace y regresa al tren del que se baja como si se le hubiera olvidado algo y habla con el maquinista al que pregunta qué hay que hacer para seguir hasta A Coruña".

Ese maquinista ya fue entrevistado por la Guardia Civil y asegura que al joven le indica que tiene que subirse en el tren que acababa de llegar "pero Yago no sé muy bien por qué pero se olvida del tren quizá porque iba muy despacio o porque estaba muy lleno y sale en busca del autobús", piensa su padre que continúa asegurando que quizá su hijo no sabía que la estación de Cerdido está rodeada de pocas casas y la estación de autobuses queda a más de dos kilómetros. "Hablamos de un domingo 14 de julo a las doce de la mañana, una hora en la que hay gente en las carreteras y algunos de los vecinos de la estación sí le identifican, pero después ni el lunes ni el martes se conoce su rastro". 

"Nuestra lucha ahora mismo es encontrarlo de alguna manera y acabar con esta incertidumbre que tienes e incertidumbre que se genera de no tener ninguna pista que seguir. No tener nada donde agarrarte y darle vueltas y vueltas a la cabeza al mismo tiempo que ves como la Guardia Civil investiga y no saca nada de donde tirar es desesperante", reflexiona. Preguntado sobre la posibilidad de una desaparición voluntaria el padre asegura que "siempre tienes esa opción, pero Yago está preguntando cómo llegar a A Coruña". El padre se encuentra ahora con muchos de los amigos de su hijo que o han cesado en su búsqueda "y que ahora son mis amigos". 

Mostrar comentarios