Londres, 19 ene.- Combatientes del Estado Islámico en Siria han entrenando a nuevos reclutas cerca de la frontera con el Líbano y amenazan con lanzar ataques transfronterizos, señala hoy el diario británico "The Daily Telegraph".
El grupo ha entrenado a reclutas y desertores de pequeñas facciones rebeldes en Qalamun, una provincia de importancia estratégica en el suroeste de Siria que limita con el Líbano.
Varios de esos grupos rebeldes pequeños, algunos alineados con el más moderado "Ejército Libre de Siria", han capitulado ante los yihadistas en los últimos meses y muchos se han unido al Estado Islámico (EI).
El crecimiento del grupo en la zona significa que los combatientes suníes del EI en Siria se encuentran ahora cerca de sus enemigos chiíes de Hizbulá, cuyos hombres luchan junto al régimen del presidente sirio, Bashar al Asad.
"Los grupos rebeldes moderados en la frontera se han derrumbado, y sus hombres se han unido a EI", dijo Ahmed Flity, sub-alcalde de Arsal, una localidad libanesa fronteriza.
Según el diario británico, la bandera negra de EI se ve claramente ondear a pocos metros del solitario puesto de control del ejército libanés que marca la frontera entre Arsal y Siria.
Por ese punto pasa una de las principales rutas para el contrabando de dinero y teléfonos por satélite a activistas sirios que se oponen a Al Asad, añade el rotativo.
La posibilidad de comprar armas en el marcado negro se hace posible gracias a los contrabandistas, que han establecido tiendas en tierra de nadie, lejos del alcance de las leyes de cualquier país, indica "The Daily Telegraph".
Abas Ibrahim, jefe de la oficina del Líbano de Seguridad General, estimó que alrededor de 700 combatientes de los grupos menos extremistas afianzaron su "lealtad comprometida" a EI.
Aunque Abu Bakr al Bagdadi, líder de EI, no está interesado en la adquisición del Líbano, una fuente cercana al grupo yihadista dijo que están conspirando para atacar una serie de ciudades y aldeas libanesas en la frontera del país que forman una base de apoyo a Hizbulá.
Con la bandera de EI ondeando en el centro de la ciudad libanesa de Arsal, los yihadistas son ahora la fuerza dominante en las montañas que conforman una tierra de nadie.
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