Roma, 21 feb.- Un fuerte y repentino temporal de lluvia y granizo azotó hoy la ciudad italiana de Catania, en el este de Sicilia, convirtiendo algunas calles en auténticos torrentes, que obligaron a los vecinos a refugiarse en los pisos altos de los edificios para evitar ser arrastrados por las aguas.
Según informaron los bomberos, las autoridades locales intentan localizar a un hombre cuyo bolso fue encontrado flotando con documentos identificativos en su interior cerca de la Villa Pacini, al tiempo que tuvieron que rescatar a otra persona que estaba a punto de ser llevada por la corriente.
Las imágenes que los vecinos hicieron llegar a los medios muestran cómo las calles se transformaron en poco tiempo en auténticos ríos o embalses de agua, en parte procedente de los pueblos de las laderas del volcán Etna, con los techos de los coches que apenas conseguían sobresalir y algunas motos que eran arrastradas.
Este temporal obligó a activar el sistema de Protección Civil al Ayuntamiento de Catania, toda vez que el consistorio aseguró que no había recibido avisos meteorológicos sobre este fuerte aguacero.
El aeropuerto de Catania tuvo que cerrar durante unas horas por el temporal y cuatro vuelos fueron desviados al vecino aeródromo de Palermo, en el extremo noroccidental de Sicilia, por lo que se produjeron numerosos retrasos en las salidas de los aviones.
Los colegios de la ciudad siciliana permanecerán cerrados mañana por orden del alcalde, Raffaele Stancanelli, para permitir que los técnicos municipales lleven a cabo controles sobre posibles daños estructurales en los centros educativos.
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