Según las informaciones facilitadas por el diario saudí 'Arab News', el tribunal ha dado carpetazo al caso argumentando que no cuenta con jurisdicción, después de escuchar los argumentos de defensa y acusación.
La constructora, Bin Laden Group, ha argumentado durante la investigación que se produjeron cambios repentinos de viento, que provocaron la caída de la grúa sobre cientos de peregrinos.
La empresa constructora, que pertenece a la familia del fallecido líder de Al Qaeda Usama bin Laden, llevaba al frente desde hace cuatro años de los trabajos de ampliación de la Gran Mezquita para alojar al número creciente de peregrinos.
La Meca es destino de millones de musulmanes con motivo de la peregrinación, uno de los pilares del Islam. En 2014, el Gobierno saudí limitó el número de peregrinos por motivos de seguridad, debido a las obras en la Gran Mezquita.
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