El gallego volvió a competir en Des Moines tras sus experiencias en 2012 y 2013, logrando en ambas ocasiones la victoria, de ahí que su presencia allí fuese acogida con entusiasmo por el triatlón estadounidense.
Noya salió en cabeza del agua con más de medio minuto de ventaja; fue superado en bici por el estadounidense Von Berg, especialista en este tipo de reglamento, pero sin perder mucho tiempo; y finalmente pudo remontar en la tercera fase para cruzar la meta victorioso con 45 segundos sobre Jason West.
"Estoy muy contento de haber vuelto a ganar en Des Moines, tanto por les buenos recuerdos que me trae este triatlón como por haber servido de puesta a punto para la cita de la que semana que viene. Al principio del ciclismo me costó encontrar el ritmo de ahí que tuviese que esforzarme más de lo previsto, de ahí que tuviese que esforzarme más de lo previsto para recuperar el liderato a pie", valoró el español.
Tras este gran resultado, Gómez Noya permanecerá en los EEUU de cara a ese Mundial de Ironman (2 kilómetros de natación, 90 de ciclismo y 21 a pie) título que ya logró en 2014 y en el que tendrá que medirse con rivales de muchísimo nivel.
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