Guardiola prohibió el wifi en las concentraciones del Manchester City para que sus jugadores se centrasen en el partido, pero lo que propone Uli Hoeness, presidente del Bayern de Múnich, roza el surrealismo. El que no hable alemán debería pagar una multa, así de simple.
"Deben hablar más alemán. El idioma es un nexo de unión. De otra forma se hacen 'grupitos'", afirma Hoeness en una entrevista en 'SportBild'.
"Si no lo aprenden deberían pagar. Ese debe ser el camino", añade el directivo, asegurando que sería clave que los futbolistas del Bayern extranjeros estudiasen alemán dos horas al día.
Que sepa Hoeness que Carlo Ancelotti, actual entrenador del Bayern no habla alemán, así que su controvertida norma podría extenderse hasta el banquillo.
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