El futbolista más viejo en participar en una Eurocopa, el guardameta húngaro Gabor Kiraly (40 años) se distingue tanto por sus paradas decisivas como por su eterno pantalón gris, que lleva debajo del oficial, que ha llevado durante casi veinte años en los campeonatos alemán e inglés.
Kiraly, que cumplió 40 años el 1 de abril, tiene más un look de jugador de domingo que de portero internacional.
"Necesito un poco más de tiempo antes de recuperarme, pero tengo la condición física y la experiencia. Y estoy siempre motivado", señaló el jugador de 800 partidos a la AFP en Szombathely (este del país), su ciudad natal, donde regresó esta temporada para terminar su carrera en el club que lo formó.
Con 101 partidos internacionales, este gigante (1,91 m) jovial, que fue catalogado como "mejor jugador húngaro de la fase de clasificación" por la UEFA, ya ha igualado el récord nacional de encuentros con la selección de Jozsef Bozsik, centrocampista del mítico "Once de Oro" de los años 1950.
Salvo accidente, debe convertirse el 14 de junio en Burdeos, frente a Austria (Grupo F), en el jugador más veterano en disputar una Eurocopa, con un año más que el alemán Lothar Matthäus en 2000.
Una cosa es segura: incluso con un partido de mucho calor, Kiraly llevará su pantalón gris todo el partido.
Una costumbre tomada tras una serie milagrosa de victorias con el Szombathely en 1996.
"Soy supersticioso. Sin pantalón, no me siento cómodo. Para mí, lo esencial en un terreno es sentirme bien, no parecerme a un top model. Es una cuestión al mismo tiempo física y psicológica", confió.
Tras aquella serie gloriosa con su primer club, ha defendido los colores de Hertha Berlín, Crystal Palace, West Ham, Aston Villa, Burnley, Bayer Leverkusen, Múnich 1860 y Fulham.
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