Uruguay, Argentina y Brasil defienden la cima sudamericana

El líder Uruguay y los escoltas Brasil y Argentina, sin Lionel Messi, defienden el jueves la cima en la clasificatoria sudamericana a Rusia-2018, con Colombia al acecho y Ecuador en busca de la gloria perdida.

El partido más riesgoso de la novena fecha lo encara Argentina, que debe demostrar ante Perú en Lima que se puede arreglar sin su superestrella, lesionado en el aductor de la pierna derecha.

La albiceleste, tercera con 15 puntos tras Uruguay y Brasil, quiere sacarle el cartel de imprescindible a su capitán, y el entrenador Edgardo Bauza se rompe la cabeza para armar un esquema sólido sin el mejor jugador del mundo, mientras Perú respira.

"En el lugar de Messi podría jugar (Paulo) Dybala (Juventus) o Angel Correa (Atlético de Madrid). Cuando vea cómo llegan lo terminaré de definir", dijo este lunes Bauza en Lima.

Es el tercer partido que dirigirá 'el Patón' al frente de Argentina, dos de ellos sin Messi. En el anterior, de visita ante Venezuela, salvó la ropa a último momento con un empate 2-2 tras ir en desventaja 2-0.

Sin tener que enfrentar al estelar argentino, Perú recibió la mejor noticia en mucho tiempo, pero su técnico, el argentino Ricardo Gareca, deberá remar y mucho para que los incaicos, antepenúltimos con siete puntos, sueñen con volver a un Mundial tras España-1982.

El 'Matador' uruguayo Edinson Cavani se despertó de su larga siesta parisina en el PSG con ocho goles en ocho jornadas ligueras y está a punto de pistola para enfrentar al colista Venezuela (dos puntos) en el Centenario.

No será París, pero Montevideo debería ser una fiesta el jueves en el mítico Centenario si Cavani y el asesino del gol Luis Suárez están encendidos.

Se enfrentan los dos extremos de la tabla con Uruguay (16 puntos) en la cima soñando con el boleto directo a Rusia-2018 y evitar la repesca por primera vez tras cuatro mundiales y una Venezuela que se encamina a mantenerse como el único de los diez seleccionados de Sudamérica que no ha clasificado nunca a un Mundial.

Otra selección con un panorama bastante alentador es Brasil (15 puntos), que con su estrella Neymar en ascenso recibe en Natal el jueves a la débil Bolivia, cerca del abismo (siete unidades).

De la mano de Tite, la seleçao encara el proceso postraumático de su Mundial-2014 que la dejó aturdida por muchos meses, incluidos sus estrepitosos fracasos en las dos últimas ediciones de la Copa América (Chile-2015 y EEUU-2016).

Con la medalla de oro en Rio-2016, la única que estaba ausente de las vitrinas brasileñas, Neymar se ganó el título de ídolo en el país del fútbol y con ese impulso hizo reaccionar a tiempo al pentacampeón en el premundial, cuando parecía que comenzaba a peligrar su boleto a Rusia-2018.

Ecuador viene en caída libre con apenas un punto en los últimos cuatro partidos del premundial, luego de haber ganado los cuatro primeros choques al hilo, incluida una sonora victoria ante la Argentina de Messi en Buenos Aires en el debut.

La Tricolor recibe en la altura de Quito (2.850 metros) a la también necesitada selección chilena, la bicampeona de América, que en la clasificatoria está en el séptimo lugar, por el momento fuera de los cuatro boletos directos a Rusia-2018 y de la repesca con un seleccionado de Oceanía.

Liderada por su generación dorada, la Roja conquistó en un año (Chile-2015 y EEUU-2016) los dos únicos títulos de su historia, pero se meterá en un serio problema de cara al Mundial si no comienza a sumar en una competencia tan apretada y pareja como la eliminatoria sudamericana.

Colombia, posiblemente sin su estrella James Rodríguez, lesionado, quiere aprovechar el cachetazo que recibió Paraguay en la fecha anterior ante Uruguay (4-0) para llevarse este jueves de Asunción un resultado que lo mantenga entre las cuatro selecciones con boleto directo a Rusia-2018.

La selección cafetera viene de una derrota ante Brasil 2-1 pero no fue motivo de sufrimiento mayor ante el poderoso rival en un partido parejo.

De su lado, la albirroja tiene margen aún para dar pelea en un premundial que tiene a los primeros seis equipos con una diferencia de apenas cuatro puntos.