Alonso acabó por fin una carrera y logró ser undécimo en el Gran Premio de Malasia de Fórmula Uno. Toda una gesto teniendo en cuenta su motor. Menos suerte tuvo Carlos Sainz que abandonó en la vuelta 30 por un problema mecánico.
Por lo demás la carrera demostró que el Mundial sigue vivo. Vettel, que ayer sufría su particular via crucis, salió último pero en una carrera memorable logró acabar cuarto.
El holandés Max Verstappen ganó por delante del británico Lewis Hamilton (Mercedes) y del australiano Daniel Ricciardo (Red Bull) con lo que añadió emoción al Mundial.
Ésta es la segunda victoria de Max Verstappen, quien ayer celebró su vigésimo cumpleaños, como piloto de Fórmula Uno. La anterior la logró en el Gran Premio de España de 2016, con 18 años, 7 meses y 15 días, convirtiéndose en el campeón más joven de la historia.
El mexicano Sergio Pérez (Force India), por su parte, fue sexto. La decimonovena edición del Gran Premio de Malasia es la última, ya que la Fórmula Uno no regresará a Sepang a partir de la próxima temporada por decisión del gobierno de ese país.
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