Altadill: "La Sydney Hobart es una regata de velocidad, no un maratón"

Redacción deportes, 26 dic.- El barcelonés de 51 años Guillermo Altadill, que compite por tercera vez en la Rolex Sydney Hobart, como navegante del Ker51 alemán 'Varuna', opina que esta "es una regata de velocidad y no una maratón, hay que tomar decisiones muy rápido y para un navegante que pasa tres días sin dormir es realmente complicado".

Ganador de la Sydney Hobart en 2001 reconoce que "ese es el reto que debes afrontar de este tipo de regata, en comparación con una travesía transatlántica o una regata alrededor del mundo".

"628 millas náuticas (1.164 Km.) es una distancia más difícil porque no tienes tiempo suficiente para dormir algo", ha añadido.

Altadill considera que la privación del sueño es algo que siempre va unido a la vela, por su experiencia de casi un cuarto de siglo como regatista profesional, que se inició en la edición 1989-1990 de la Whitbread Round the World Race (actual Volvo Ocean Race) a bordo del 'Fortuna Lights Extra' española.

Ha participado en la 'Barcelona World Race', cuatro ediciones de la Whitbread, varias ediciones en la 'Volvo Ocean Race' además de 18 travesías del Atlántico. También formaba parte de la tripulación del catamarán 'Cheyenne' que estableció el récord Jules Verne de la circunnavegación más rápida del mundo.

Su secreto para superar la carencia de sueño está en beber café de vez en cuando, y tomarse tiempo para sentir el aire fresco en la cubierta.

"Siempre pensé que los navegantes vienen de un mundo diferente. Son a menudo excéntricos, demasiado inteligentes y pierden el contacto con el mundo real cuando están en la cubierta. Es por eso que me gusta estar involucrado con la tripulación; procuro ser medio navegante y medio tripulante", indica medio bromeando.

Después de haber estado asesorando a la tripulación del 'Varuna' durante los últimos dos años, esta es la primera regata de Altadill a bordo del Ker 51, que se presenta como muy competitivo para vencer en su clase en esta Sydney Hobart.

"Cada vez la competición es más difícil. El problema es que hay mucha información y debes procesar esta información cada dos o tres horas. Y en el momento en que terminas ya tienes más para procesar", ha apuntado.

"Esto añade al navegante una gran cantidad de estrés. Antes era más relajante, había tiempo para pensar;hay tanta información ahora y no tienes tiempo para procesarla", añade.

El Ker 51 'Varuna' ha sido diseñado principalmente para la navegación oceánica y se botó en abril de 2012 en la ciudad alemana de Hamburgo. Su propietario, Jens Kellinghusen, ha anunciado que va a competir en las grandes regatas oceánicas de todo el mundo.