Barcelona 1-1 Atlético: Courtois 'echa el candado' y deja todo abierto para la vuelta

Cuando al Barcelona se le apagaron las luces con el golazo de Diego Ribas apareció Iniesta para darle al interruptor. Un pase en profundidad, en el minuto 70, sorprendió a Godín y fue aprovechado por Neymar para marcar a Courtois y poner el empate. El mérito está en la asistencia. En ocasiones no hacen falta hacer regates ni filigranas, ser el más técnico ni tener el mejor físico para romper a un equipo. El fútbol está en la cabeza y la de Iniesta es una de las más privilegiadas del mundo en este deporte. Colgará las botas sin haber ganado un Balón de Oro. Da igual, es un mago y ayer salvó al Barcelona de una derrota y, sobre todo, de que se volviera a hablar del fin de ciclo, pese a que Dani Alves se ría.

Iniesta es el Messi español. Y ayer fue el Messi del Barcelona porque el argentino pasó por el partido sin hacer ruido. Tan solo tuvo una ocasión, en el minuto 84, en un lanzamiento de falta que desvió Courtois. El manchego se empleó a fondo en los dos periodos. Verle entrar en contacto con el balón es impagable. Retrocedió hasta la defensa para pedirlo, lo aguantó en sus pies, se quitó adversarios de encima pasándose la pelota de un pie a otro, como un bailarín, se fue al ataque, asistió y le dio aire a sus compañeros cuando estaban tocados. En el palco del Camp Nou estaban Del Bosque y Scolari. El seleccionador español salió hinchado y el brasileño asustado. Un buen Iniesta te puede hacer, por lo menos, no perder un partido.

Lo que hizo el Atlético tiene mucho valor. Jugó sin Diego Costa, lesionado en la primera parte, que es lo mismo que no contar con la estrella del equipo. Pero el equipo del 'Cholo' no se resintió y volvió a confirmar que es un grupo en el que todos trabajan con intensidad y concentración para robar la pelota y se suman al ataque para hacer daño. El planteamiento de los riojiblancos fue atrevido. Se fueron a presionar, desde el primer minuto, hasta el área de Pinto y lograron anular la salida del balón de los culés y la circulación. Perfecto el trabajo en bloque en una primera parte en la que los rojiblancos tuvieron las mejores ocasiones de gol en las botas de David Villa, que pudo hacer dos tantos. El Barcelona no encontró su fluidez ni su sitio y vivió de la respiración asistida que suministraba Iniesta.

El Barcelona tiene un problema en la portería. Falló Pinto en el golazo de Diego Ribas. El brasileño soltó un zapatazo maravilloso, pero parable. Aquí estuvo la diferencia entre dos equipos que están igualados. Courtois tuvo actuaciones decisivas en la segunda parte, a disparos de Busquets, Iniesta y Messi, y Pinto se 'comió' el tiro de Diego Ribas.

La eliminatoria está abierta gracias a Iniesta. Aunque el Barcelona hubiera perdido no se le podría haber descartado, pero tener a Iniesta en el equipo da moral. Tampoco puede presumir el 'Tata' del juego ni Messi de ser el que era antes de la lesión que le obligó a irse a Argentina a recuperarse. El Atleti sale reforzado del Camp Nou.