Barcelona 3 - 0 Bayern: el talento se impone y Messi acerca al Barça a la final de Berlín

    • El argentino decidió el partido y puede que la eliminatoria con dos goles en tres minutos. El segundo, tras un regate y una definición espectacular. Neymar dio la puntilla al Bayern en el último minuto.
    • El Barcelona mereció la victoria y Neuer salvó a los alemanes antes del doblete del argentino.

Guardiola encaró el túnel, subió los escalones y por primera vez no enfocó hacía la izquierda. Huyó del protagonismo, giró a la derecha y se sentó en el sillón del visitante. Ese fue el mayor esbozo de timidez de alguien en un Bayern que protagonizó un enorme duelo de golpes con un Barcelona que decidió el que sigue siendo el púgil con el mejor jab: Leo Messi. Cuando Pep y Neuer habían logrado contrarrestar todas las virtudes de un conjunto culé desesperado, el argentino apareció para acercar al Barcelona a Berlín.'El Barcelona no pudo con Neuer' era el títular perfecto para un crónica escrita antes del minuto 77. Porque hubo un partido antes y después de ahí.

Antes del primer gol de Messi, es de recibo destacar que la primera parte fue una oda al fútbol. Quizás desde la zona técnica se vislumbró todo como una descomposición defensiva preocupante pero para los que lo vieron desde la grada o la televisión disfrutaron de unos primeros 45 minutos donde reinó la locura. Y claro, ahí goza el personal. Guardiola quiso presumir de osadía y salió al Camp Nou a pecho descubierto con una defensa de tres y un dibujo asimétrico que llevó al frenesí durante los primeros 20 minutos. Hasta ahí, el Barcelona buscó con ahínco las espaldas de la adelantada defensa bávara y Luis Suárez estuvo a punto de adelantar a los culés pero apareció Neuer. Ter Stegen lanzó como un 'quarterback', Messi peinó (sí, peinó) y dejó vía libre al uruguayo para que definiera. Más allá del gol, esa jugada dibujó lo que es el Barcelona de Luis Enrique: un híbrido capaz de hacerte besar la lona después de tropecientos goles o con un simple gancho de derecha. Esa es la gran obra de Luis Enrique. Después los resultados quitaran o pondrán méritos pero éste hecho está ahí junto con el de la notable mejoría a balón parado.

Era un duelo de golpes sobre el ring y ahí, el equipo con mejor gancho, el Barcelona, tenía todas las de ganar. Messi, Neymar y Suárez, a día de hoy, pegan más fuerte que Lewandowski o Müller. El polaco estuvo a punto de llegar a boca de gol tras ser asistido por el alemán. El Camp Nou tembló porque había todo menos zozobra. Esto era ida y vuelta de la gusta al personal y castigan los entrenadores. Por ello Guardiola rectificó y mandó a cuatro hombres atrás para confiarlo todo a la contra. Su plan desde el comienzo era claro: arriesgar atrás, poblar el centro del campo y anular a un Sergio Busquets que vivió la primera parte más aburrida que se le recuerda. Al contrario que el meta alemán, que también desbarató la otra gran ocasión de la primera mitad ante Neuer. El brasileño definió dentro del área pero el portero del Bayern achicó y aminoró el ánimo culé. En esos minutos ya no era una pelea por la posesión, el conjunto culé dominaba y el Bayern jugaba con el resultado consciente de que a Berlín se iba por Múnich.Messi impone su ley

Tras el descanso Guardiola le puso cabeza al partido y el Bayern fue más práctico. Su dibujo era más claro, asumió el control del esférico y presionó la salida de balón blaugrana como si fuera el Barcelona de 2008. Ahí sufrió el conjunto de Luis Enrique pero el Bayern sólo tenía balas de foguero. Aún no había tirado a puerta pero el conjunto alemán ya sonreía simplemente por el hecho de aniquilar las principales virtudes de un Barcelona que se impacientó porque no encontraba el camino. Y cuando era capaz de jugar con holgura siempre aparecía Neuer de la nada.

Y ahí, en pleno desconcierto culé apareció Messi. Corría el minuto 77 cuando Alves robó, cedió al '10' y este lanzó su clásico zurdazo desde fuera del área pero esta vez, para sorpresa de Neuer, el balón fue al palo corto. 1-0 pero lo mejor estaba por llegar. Cuando el Bayern estaba contra las cuerdas, Leo la agarró, rompió a Boateng con un gesto de bailarina y la picó por encima del meta bávaro. 2-0 y deliro. Para Guardiola era una pesadilla pero iba a tardar en despertar. Neymar, a falta de un minutos, daría la estocada definitiva. Ante Pep, el Barcelona sacó un billete para Berlín porqueganó el que tuvo al mejor del Mundo. Triunfó el que tiene a Leo Messi.Guardiola no pudo parar el talento.

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