Barcelona y Atlético ganan con apuros y por la mínima a dos recién ascendidos

  • Los de Simeone marcaron en un balón suelto a la salida de un córner en el Wanda y Dembelé volvió a decidir para los de Valverde en Valladolid.
El entrenador del Barcelona, Ernesto Valverde
El entrenador del Barcelona, Ernesto Valverde
LALIGA.ES

Fútbol Club Barcelona y Atlético de Madrid solventaron sus respectivos partidos correspondientes a la segunda jornada de LaLiga con idéntico resultado y similares apuros para asegurarse los tres puntos frente a dos recién ascendidos a la categoría: el Real Valladolid y el Rayo Vallecano. 

También tuvieron que esperar ambos a la segunda mitad para romper el marcador. En el caso de los colchoneros, Antoine Griezmann aprovechó un balón suelto al borde del área pequeña a la salida de un córner para adelantar a los de casa y luego entregarse a la seguridad de su portero, Jan Oblak, para cerrar el marcador. Y en Zorrilla, el actual campeón volvió a tener en uno de los jugadores aparentemente transferibles, el francés Dembelé, a su protagonista, ya que marcó por segunda jornada consecutiva. Posteriormente, el VAR anularía un gol del vallisoletano Keko en el descuento del partido. 

Sea como sea, Atlético y Barcelona se llevaron los tres puntos, con lo que los de Simeone se sitúan con cuatro puntos y los de Valverde.

Estrenos en el Wanda

El Atlético de Madrid protagonizó un partido flojo. Tanto rojiblancos como franjirrojos se citaron en el Wanda Metropolitano con un objetivo claro: sumar los tres primeros puntos de la temporada. Los colchoneros, en un partido sin demasiado voltaje, lo lograron por medio de Griezmann, que también estrenó su casillero de goles esta temporada. Oblak, por su parte, agrandó su figura para ser determinante con el tiempo cumplido. El Rayo, a pesar de mejorar su imagen respecto al debut, volvió a quedarse sin sumar.

El conjunto local trató de hacerse con el balón en los primeros compases, unos minutos con acercamientos sin demasiado peligro por parte de los dos equipos. Poco a poco, el Atleti se fue adentrando en campo rival ante un Rayo bien plantado sobre el césped y que comenzó a animarse en ataque. Una de las malas noticias para los locales fue la salida de Juanfran, por molestias musculares. El de Crevillente parece que le ha ganado la partida a Santiago Arias en este comienzo de temporada.

Tanto es así que Diego Pablo Simeone dio entrada a Thomas Partey en el lateral derecho en lugar de al colombiano, que no se encontraba ni en el banquillo. Ángel Correa, en forma tras su gol al Valencia, se encargó de dar un toque de sal a un choque, por momentos aburrido, con buenas acciones. La oportunidad más clara para los colchoneros llegó a 10 minutos para el descanso, con un disparo de Thomas Lemar, que repelió de forma magnífica Alberto. 

En la reanudación, los pupilos de Simeone salieron dispuestos a meter una marcha más. Lucas Hernández, que debutó en Liga este sábado tras cumplir sanción ante el Valencia probó fortuna con un disparo al lateral de la red. El galo partió como titular en detrimento de un Filipe Luis que sigue a vueltas con su salida. El cuadro vallecano no se amilanó y Álvaro García, uno de los refuerzos veraniegos de los de Míchel lo intentó con un tiro alto.

Sin embargo, fue Griezmann el que llevó el delirio de la grada del Metropolitano, entregado al francés después de su decisión de quedarse en el equipo, rematando a bocajarro un balón suelto tras un saque de esquina. El Rayo trató de reaccionar e inquietó en los últimos minutos a una dubitativa defensa colchonera.

Fue en ese momento cuando Jan Oblak le quitó el papel de protagonista al delantero para vestirse de héroe. El esloveno atrapó a Embarba un lanzamiento de falta, rechazó un disparo dentro del área de Pozo y, ya en el 90' realizó una parada milagrosa a Sergio Moreno rayista para dejar los tres puntos en casa.

El VAR decide en Valladolid

Mientras tanto, un gol de Dembélé y la aplicación del VAR, que anuló un gol en la prolongación del blanquivioleta Keko, sirvió al Barcelona para sumar los tres puntos en un José Zorrilla convertido en patatal por el mal estado del césped, y colocarse líder de LaLiga Santander en la segunda jornada.

Los azulgrana tuvieron las ocasiones más claras en un partido trabado, con poco fútbol y acierto por parte de los de Ernesto Valverde que se toparon con un Real Valladolid sólido, asociativo y que nunca perdió la cara la encuentro. Las ocasiones más claras fueron para el actual campeón que, sobre todo en la primera mitad, tuvo el punto de mira desviado. Al final el VAR sacó del primer aprieto al equipo catalán que encabeza la clasificación provisional.

El partido comenzó con el guión previsto, un Real Valladolid asociativo, sólido y que buscaba la velocidad de Plano y Villa a la contra plantaba cara a un Barcelona que manejaba el balón sin lograr romper la línea de presión blanquivioleta. Messi buscaba su sitio y pronto empezó a encontrarlo.

El argentino, sin estar demasiado cerca del área, quebraba la defensa local con diagonales que dejaban en superioridad a los atacantes azulgranas, pero ni Dembélé, ni Luis Suárez estuvieron finos, en parte también por la buena actuación de Masip que sacó dos manos, una al delantero uruguayo y otra a Coutinho que privaron al conjunto azulgrana de irse con ventaja al descanso, después de un monólogo de los de Ernesto Valverde a partir del minuto 30.

En la reanudación el Barcelona fue más reconocible. Al dominio le añadió pegada. Pese a un disparo cruzado del turco Ümel, los azulgrana se pusieron por delante en el marcador en una jugada trenzada entre Suárez y Roberto que, esta vez, Dembélé no desperdició para batir cruzado y por bajo a Massip.

El partido lejos de morir siguió abierto a pesar de que el Barcelona se cosió el balón al pie como pudo, entre las chuletas de césped que no dejaron de levantarse en el José Zorrilla recién replantado. Los blanquivioleta tiraron de orgullo para apretar a los de Valverde que se vio obligado a meter más músculo en el centro del campo con la entrada de Vidal.

Keko, que desde el banquillo y junto a Cop dieron aire y profundidad a los de Sergio González, tuvo el empate en un balón que llegaba desde la zona izquierda del ataque local y que sorteó a los dos centrales azulgranas, pero su remate de cabeza acabó en las manos de Stegen.

El Barcelona no vivió tranquilo los últimos minutos pese a un gol anulado a Luis Suárez y un mano a mano que desperdició Malcon sobre el tiempo reglamentario. La fe de los blanquivioleta hizo a los de Valverde pedir la hora para sumar ya seis puntos en un final polémico por la entrada del VAR para confirmar el fuera del juego de Keko señalado por el asistente y que hubiera significado el empate.

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