Borussia 4-1 Real Madrid: cómo ha ganado Klopp la batalla táctica a Mourinho

El Real Madrid cayó con claridad y estrépito ante el Borussia Dortmund. El equipo de José Mourinho partía como favorito pero nunca consiguió imponer su propio ritmo de partido.

Por estas razones ganó Klopp la batalla táctica.Gotze anula a Xabi Alonso. La estrella, traspasada ya al Bayern, se puso el mono de trabajo cuando su equipo no tenía el balón. Klopp sacrificó mucho de su potencial ofensivo para que encimase al timón del Real Madrid, Xabi Alonso.Presión asfixiante en los primeros minutos. El Dortmund salió en tromba nada más escuchar el pitido del árbitro. El Madrid no estaba preparado para una presión tan intensa y el dibujo táctico de Mourinho tampoco ayudaba. Tenía otras intenciones el portugués y se encontró con la horma de su zapato.Calidad de Reus y los apoyos de Lewandowski. Reus desbordó siempre que quiso a la defensa del Real Madrid. Buscó con inteligencia los espacios y se complementó de maravilla con un delantero potente como Lewandoski. El nueve polaco no solo estuvo resolutivo ante el marco contrario; también combinó con inteligencia con los otros atacantes. Él fue el responsable de que Reus, Gotze y Gundogan pudieran pisar área con asiduidad.Desaparecido Ozil. El jugador alemán de Madrid no se sintió cómodo sin el balón. Mourinho lo situó demasiado abierto, demasiado lejos de donde fabrica su mágica forma de organizar el juego. Sin la mejor versión del jugador turco el equipo se perdió en el centro del campoMejor forma física de los alemanes. Los germanos empezaron a correr en el primer minuto y no dejaron de hacerlo en los siguientes 89. Hubo siempre apoyos entre los jugadores amarillos y en pocas veces pudo hacer superioridad el equipo blanco. En el Real Madrid se vieron gestos de cansancio desde el minuto 20. Como muestra, las dificultades para recuperar la posición de Coentrao y Khedira.Sin orden y sin ideas.En la coherencia del juego del Borussia llegó la anarquía del Real Madrid. No tuvo 'plan b' Mourinho para la presión del equipo de la Cuenca del Rurh. Además de no modificar su táctica para adaptarse a la nueva situación, el entrenador portugués tardo demasiado en hacer los cambios.