Brasil cumplirá cien partidos en Mundiales con la obligación de puntuar

Manuel Pérez Bella

Teresópolis (Brasil), 19 jun.- Brasil jugará el próximo lunes contra Camerún su centésimo partido en Mundiales con la obligación de puntuar para garantizarse la clasificación a octavos de final en su torneo.

El hito de Brasil sólo lo ha alcanzado Alemania, que jugó su partido número cien en mundiales en la primera jornada de Brasil 2014, en su victoria por 4-0 sobre Portugal.

La selección brasileña es la única que no se ha perdido ni una edición del torneo, ha sido una presencia fija desde Uruguay 1930 y ahora como anfitriona está comenzando su andadura en su vigésima Copa del Mundo.

En sus primeros 99 partidos mundialistas Brasil ha cosechado cinco títulos mundiales, en 1958, 1962, 1970, 1994 y 2002, con un balance de 68 victorias, 16 empates y quince derrotas.

En los almanaques quedan futbolistas que inscribieron su nombre en la historia de los mundiales como Vavá, Pelé, Garrincha, Rivellino, Jairzinho, Romário, Bebeto, Ronaldo o Rivaldo.

El país que reinventó el fútbol y se lo apropió, también alcanzó la final en 1950, la célebre derrota ante Uruguay conocida como el Maracanazo, y la de 1998 en la que la Francia de Zinedine Zidane les privó del título.

Siempre quedará para el recuerdo la magnífica selección de 1982 que, con Zico al frente, enamoró al mundo con un fútbol ofensivo y de toque, pero que al quedar eliminada ante Italia, en un episodio conocido en Brasil como "la tragedia de Sarriá", precipitó el entierro del "jogo bonito".

El partido de su centenario, la Canarinha necesita al menos de un empate para garantizar la clasificación y una victoria para asegurarse el primer lugar de su grupo, sin depender de otros resultados.

La tarea se presenta fácil sobre el papel, sobre todo después del triunfo arrollador de Croacia sobre Camerún (4-0) este miércoles en Manaos, que tuvo como gran beneficiada colateral a Brasil.

Con esta derrota, la segunda consecutiva en el Mundial, Camerún quedó desahuciado, sin posibilidades de pasar a octavos y por ello el equipo de Samuel Eto'o se quedó casi sin alicientes para presentar batalla a los anfitriones en el partido que jugarán el lunes en Brasilia.

A pesar de que el rival parece asequible, la selección dirigida por Luiz Felipe Scolari no podrá relajarse porque si pierde y en el otro partido del Grupo A empatan Croacia y México, Brasil se despediría de su Mundial de forma prematura.

Brasil suma cuatro puntos, fruto de su victoria por 3-1 contra Croacia y el empate 0-0 ante México, y estas dos selecciones cuentan con tres unidades.

Más allá del resultado, Brasil necesita aprovechar el partido para trabajar en mejorar su juego, que ha generado un descontento generalizado en la prensa y los aficionados en los dos primeros encuentros del torneo.

El objetivo supremo es concluir el Mundial con 104 partidos en la mochila y el triunfo en la final del Maracaná, que tendría como rédito el "hexa", el sexto título mundial, ansiado desde 2006.

En su preparación para el partido centenario, Brasil regresó hoy a la ciudad de Teresópolis, en las montañas de Río de Janeiro, donde se entrenará hasta el sábado, antes de viajar a Brasilia.