Bravos, Cardenales, Vigilantes y Orioles lucharan por dos boletos de playoffs

  • El nuevo formato del doble comodín tendrá la prueba de fuego cuando cuatro equipos -dos por la Liga Nacional y otros dos por la Americana- definan a un sólo partido su suerte de cara a conseguir el pase a las respectivas series de división.

Houston (EEUU), 5 oct.- El nuevo formato del doble comodín tendrá la prueba de fuego cuando cuatro equipos -dos por la Liga Nacional y otros dos por la Americana- definan a un sólo partido su suerte de cara a conseguir el pase a las respectivas series de división.

La prueba de fuego para el nuevo formato de los playoffs de las Grandes Ligas ha llegado con los partidos que establezcan al equipo de la Nacional y de la Americana que se unan a los campeones de división para comenzar la lucha por el título de la Serie Mundial.

El formato de un sólo juego para los que llegaron a la fase final por medio del comodín, tendrá a los Bravos de Atlanta como anfitriones de los Cardenales de San Luis, actuales campeones de la Serie Mundial.

Mientras que por la Liga Americana, los Orioles de Baltimore visitan a los Vigilantes de Texas.

Los cuatro equipos son conscientes, que bajo el nuevo formato ideado por el comisionado de la Grandes Liga, Bud Selig, no hay margen de error y sólo dos seguirán en la competición.

Las opiniones sobre el nuevo sistema que se ha implementando por primera vez esta temporada están muy encontradas, aunque se trate de la mayor innovación de la competición de la fase final desde que se estableció la figura del "wild card" (comodín) en 1994 con el incremento de dos a tres divisiones por liga.

Otro aspecto que no convence, aunque será únicamente esta vez, es que en la siguiente ronda, con una serie corta de cinco partidos, los equipos con mejor récord en la temporada regular abrirán con dos juegos fuera de casa.

Puede ocurrir que el visitante caiga en esos dos y viaje de vuelta a su estadio con la presión de tener que ganar los tres partidos si quiere seguir.

"Esto es de lo más extraño. Tienes el mejor récord y no puedes arrancar en tu campo", declaró el piloto de los Yanquis de Nueva York, Joe Girardi, cuyo equipo aguarda por el ganador del duelo entre los Orioles y los Vigilantes.

El objetivo de las Grandes Ligas apuntó a que más equipos pudiesen aspirar a la fase final, y así fue, por lo que hay satisfacción en la oficina del comisionado.

Los Filis de Filadelfia y Cerveceros de Milwaukee, equipos que se desprendieron de figuras como Hunter Pence y Zack Greinke a fines de julio, súbitamente repuntaron y encararon las últimas semanas remando por uno de los dos comodines.

Los Dodgers de Los Ángeles se vieron superados por Gigantes de San Francisco en el Oeste de la Nacional, pero hasta el penúltimo día lucharon por uno de los dos comodines de la Nacional.

Ninguno avanzó, sin embargo, la expectativa mantuvo encendido el entusiasmo de los fanáticos para ir a los estadios.

Los Cardenales fueron el último en clasificarse a los playoffs este año y su piloto Mike Matheny, que debutó con el equipo para ocupar el puesto dejado vacante por el legendario Tony La Russa no le puso mala cara a la situación.

"Estamos encantados con esto. Ahora mismo estaríamos en casa, viendo los juegos por televisión", declaró Matheny, que llegó al equipo cuando su estrella, el toletero dominicano Albert Pujols, decidió irse como agente libre a los Angelinos de Los Ángeles.

Los Cardenales mandarán al montículo para el decisivo partido a Kyle Lohse, la gran revelación de la temporada para el equipo, para enfrentarse a Kris Medlen, otro de los jóvenes valores de los Bravos, que tienen marca de 23 partidos consecutivos ganados cuando ha estado él en el montículo.

Los Bravos tienen ventaja de 5-1 en la serie que ambos equipos han mantenido esta temporada entre ellos mismos, pero la ofensiva de los Cardenales con los boricuas Yadier Molina y Carlos Beltrán junto a Matt Holliday, puede acabar con su supremacía y reivindicar su condición de campeones de la Serie Mundial.

Hay que meditar un poco sobre la coyuntura que afrontan los Orioles, en una fase final por primera vez desde 1997. Si pierden en Arlington (Texas), pues su aventura queda abortada de un golpe y sin poder albergar un partido de playoffs en Camden Yards.

Como indicó Billy Beane, el gerente de los Atléticos de Oakland, el formato tiene un lado positivo y otro negativo.

"Es excelente por todo el interés que se fomenta", valoró Beane, cuyo equipo se coronó campeón del Oeste de la Americana al superar a los Vigilantes en el último día de la campaña regular. "Lo que único que yo cambiará es darle más valor a lo que se hizo en la temporada. Un equipo que ganó tantos juegos debe sacar un beneficio".

Es argumento daría a los Vigilantes ventaja ya que fueron el equipo que más días estuvo de líder esta campaña con 178, pero el título de la división lo perdieron en la recta final.

El abridor novato japonés Yu Darvish tendrá su debut en la fase final de las mayores al subir el montículo por los Vigilantes, mientras que Joe Saunders lo hará con los Orioles.

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