Carpena dice que volvería a actuar de la misma forma en relación con Tarrés

Madrid, 30 dic.- El presidente de la Real Federación Española de Natación (RFEN), Fernando Carpena, declaró hoy en relación con el despido de la exseleccionadora de natación sincronizada Anna Tarrés que "si volviera a acontecer lo mismo que sucedió en 2012, la Federación actuaría de la misma manera"

Carpena explicó su decisión en una rueda de prensa: "Según testimonio de alguna de los deportistas integrantes del equipo español de natación sincronizada, y así lo corroboraron dos de ellas en sede judicial, fueron presionadas por la exentrenadora para firmar un acuerdo de agencia de patrocinio".

El presidente federativo destacó que en ese contrato de patrocinio, en el que no participó la Federación, se dice que si hubiera un remanente, los distribuiría la seleccionadora nacional.

Y argumentó que en el contrato de Tarrés con la Federación se estipuló expresamente que ella debería comunicar y solicitar autorización para cualquier actividad con los equipos a su cargo.

El presidente de la RFEN compareció hoy ante los medios en Madrid acompañado por la asesora legal de la Federación, Lola Saez, y el gerente, Eugenio Bermúdez, y dio un repaso a la situación de las tres demandas judiciales presentadas por la exseleccionadora de natación sincronizada Anna Tarrés.

La RFEN anunció que "interpondrá ante el Tribunal Supremo recurso de casación contra la reciente sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, desestimatoria del recurso presentado por la RFEN contra la dictada en primera instancia por el juzgado de los social de Terrasa, que declaraba nulo el despido disciplinario que se produjo en diciembre de 2012".

Entiende la institución que "la valoración de los hechos no es la correcta (la causa de despido era suficiente) y la indemnización acordada contraviene la doctrina judicial existente sobre indemnizaciones de contratos de deportista profesional", según consta en una nota entregada en la rueda de prensa.

Carpena dijo que contraviene sentencias, incluso del Tribunal Supremo.

El presidente reconoció que en una de las demandas, relacionada con el pago de los premios de Tarrés, existe "un fleco".

Agregó: "Es verdad que existe un fleco de 7.800 euros que tiene que resolver ahora el tribunal. Es una cantidad que ella reclama y que ha sido satisfecha por el COE directamente a ella, pero pretende cobrarla también de la Federación Española. Entendemos que en virtud de lo pactado en su contrato dicha cuantía está también zanjada".

Dijo el presidente: "Hay un momento determinado que hay que preservar la imagen de las instituciones a las que representamos y, por tanto, debemos de alguna manera salir a la palestra. Entonces (en 2012), una razón para no intervenir en el circo mediático fue preservar al nuevo equipo técnico, a las deportistas en esa singladura que iniciaban en el mes de octubre con vistas a los Juegos Olímpicos de Río 2016".

"Estamos aquí para cerrar mediáticamente el tema y trabajar en pos de los éxitos del deporte", consideró.

"La Federación no puede permitir que se siga intentando erosionar su buena imagen pública que la tiene a través de los resultados, pese a quien pese. No vamos a permitir un nuevo intento de menoscabar la buena imagen de la federación porque puede influir en en nuestra política exterior, las relaciones institucionales y los patrocinios, y por ende eso provoca un perjuicio a la actividad a la que nos debemos", afirmó.

Carpena declaró: "No queremos entrar en una guerra mediática ni seguir el juego a personas ajenas a la Federación en su búsqueda de notoriedad. La Federación existía antes de la contratación de la señora Tarrés y, sin duda, va a seguir existiendo cuando la natación española decida que este presidente y el equipo que le acompaña no va continuar al mando de la natación española".

"Nadie es imprescindible y la prueba la encontramos en que el equipo de natación sincronizada ha obtenido en Barcelona mejores resultados que en Shanghái en 2011", resaltó el dirigente que señaló que la natación española ha vivido en 2013 su mejor año.

El gerente de la RFEN, por su parte, explicó que los 383.300 euros que la exseleccionadora reclama a la organización por su despido disciplinario ya están contemplados en el plan de viabilidad federativo y no supondrán "un descalabro económico".