No se habían sentado la mayoria de espectadores en las gradas del Camp Nou, cuando el brasileño Pato dejaba en evidencia a la zaga del Barcelona, encaraba a Valdés y mandaba el balón al fondo de las mallas. El cronómetro indicaba 24 segundos. Pero a pesar de la rapidez, el tanto del jugador del Milan "sólo" se sitúa en el quinto más rápido de la Champions League.
Pato se mete en el top-5 por un segundo, desbancando de esa manera a Dejan Stankovic. Precisamente uno de sus compañeros, Clarence Seedorf, es el cuarto tras anotar a los 21.06 segundos en 2005 ante el Schalke.
Después se encuentran Alessandro Del Piero, al marcar al Manchester United a los 20.12 y Gilberto Silva con el Arsenal al PSV a los 20.07. Pero nadie tan rápido como Roy Makaay que, el 7 de marzo de 2007, fusiló al Real Madrid a los 10.02 segundos. Casi imposible de batir.
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