Champions League: El Valencia sigue esperando que Parejo decida aparecer

  • Fue uno de los fichajes que más ilusión despertó en el valencianismo durante el verano. El club ché pagó casi cinco millones de euros al Getafe por una de las perlas del fútbol español, un centrocampista joven y con mucha calidad. Su comienzo de temporada está apagando el entusiasmo que generó. Ante el Genk (0-0), en el estreno valencianista en la Champions, pasó desapercibido.
0-0. Estreno frustrado para el Valencia
0-0. Estreno frustrado para el Valencia
Aitor Amorós

La pesada losa de ser señalado por Di Stéfano como uno de sus jugadores favoritos de la cantera blanca sigue cortando su progresión. El mejor jugador de la historia del Real Madrid se enfadó cuando supo que el club le iba a ceder al fútbol inglés para que se fogueara, ya que considera que es uno de los mejores talentos que han surgido en 'La Fábrica'. Ni en el QPR, y en su regreso a la disciplina madridista, confirmó estas previsiones.

Con vistas a un crecimiento como futbolista que no parecía encontrar, buscó una cesión al Getafe, club donde otros canteranos blancos como Granero o De la Red se han ganado su regreso a Chamartín por la puerta grande. No fue el caso de Parejo, pese a jugar 80 partidos y marcar 11 goles en las dos temporadas que fue azulón. Su intermitencia evitó que el de Coslada entrara en los planes de Mourinho.

Con el campeonato de Europa sub'21 bajo el brazo llegó a la ciudad del Turia este verano, y en la mente de Emery estaba que Parejo asumiera el papel de creador del juego valencianista. Pero en los dos primeros partidos de Liga, para sorpresa de todos, no entró en sus planes. Su convocatoria para el estreno en la Champions League fue una dosis de motivación, un refuerzo en su confianza. Pero su partido, como el de su equipo, no fue tan completo como se esperaba.

No se escondió el madrileño, pero se mostró poco acertado y participativo. Asumió la responsabilidad de ejecutar todos los lanzamientos a balón parado, e incluso rozó el gol con un lanzamiento de falta en la segunda mitad, pero su paso por el encuentro fue poco trascendente (apenas una falta cometida y dos recibidas). A falta de un cuarto de hora del final, Aduriz ocupó su lugar sobre el terreno de juego.

El Valencia cerró su debut en la Liga de Campeones con un empate que por ocasiones no sería justo. El Genk sobrevivió, poco más hizo, y los de Emery dejaron escapar la oportunidad de empezar a encarrilar el billete a la siguiente fase. Como Parejo, que también dejó escapar su oportunidad de convencer a su entrenador.

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