¿Cómo han evolucionado el juego y el físico de Nadal en sus 13 años de carrera?

Solo tenía 15 años cuando un jovencísmo Rafa Nadal apareció en el circuito de la ATP. No consiguió ganar ningún partido, pero dada su precocidad, su nombre comenzó a darse a conocer. Solo tardó tres años en ganar su primer torneo profesional y poco a poco definió su cuerpo hasta convertirse en el tenista más fuerte del circuito. Con el paso del tiempo, las lesiones y el juego le han obligado modificar su estética.

Recién cumplida la mayoría de edad, el tenista español comenzó a ganar potencia gracias a su gran trabajo físico, pero fue en el 2005 cuando dio el gran salto. Su facilidad para levantar la pelota y que no se quedara en la red le convertía en uno de los tenistas que menos errores no forzados cometía.

Eso le hizo ganar 11 torneos ATP, incluído su primer Roland Garros, y subió hasta el número 2 del ranking. Rafa tuvo que incorporar unas plantillas en sus zapatillas para protegerle de una peligrosa lesión en el pie que le hacía pisar mal. Las principales pejudicadas han sido sus rodillas.El físico a disposición de la técnica

Pero Rafa no se quedó ahí. Siguió moldeando su cuerpo hasta llegar a su punto máximo entre los años 2006 y 2007. Su torso, sus hombros y su bíceps daban miedo. A sus grandes cualidades le añadió aún más fuerza física. Solo la calidad de Federer frenaba el juego de Nadal. El suizo dejó en 81 el récord de imbatibilidad del español sobre tierra batida y le ganó la final de Wimbledon en dos ocasiones consecutivas.

En 2008 Rafa hizo retoques en varios aspectos de su juego para poder hacer fente a Federer. Entrenó duro para mejorar su derecha y el revés cruzado, aumentó su agresividad en el juego y dejó de pegar golpes defensivos para pasar a atacar al rival. Por primera vez en su carrera ganó sobre la hierba de Wimbledon, levantó su cuarto título de Roland Garros y se situó en el número 1 del ranking mundial.Un entrenador a 'su servicio'

El 2009 fue un año muy extraño para Rafa. No encontraba su juego, cayó a las primeras de cambio en Roland Garros y perdió el número 1. Su principal déficit era el saque, por lo que su nuevo reto era igualarlo al de los mejores tenistas del mundo. Contrató a un entrenador personal especilista en mejorar el saque, Óscar Borrás. Nadal pretendía golpear más fuerte a la pelota sin perder eficacia con su servicio.

En la siguiente temporada, Rafa recupera la confianza y consigue más victorias. Su cuerpo se estiliza, ya no es tan voluminoso, pero sigue siendo igual de resistente al esfuerzo. Ganó Roland Garros, Wimbledon, el Abierto de EEUU y fue el número uno indiscutible del tenis mundial.

Djokovic, Murray y Federer vivían en un escalón por dejabo. Rafa se convirtió en un jugador totalmente agresivo. Combinaba a la perfección sus golpes de derecha con los de revés cruzado y sus inconfundibles 'passing' de revés se convirtieron en imparables.Djockovic y el síndrome de Hoffa

2011 y 2012 fueron dos años marcados por las lesiones y en los que solo ganó Roland Garros. Primero sufrió una rotura muscular justo cuando Djokovic explotó como un tenista magistral. Después fue su rodilla la que comenzó a darle problemas, defraudó en Wimbledon y no pudo acudir a los JJOO.

Los médicos le diagnosticaron el síndrome de Hoffa, que consiste en una inflamación de la zona de tejido graso que se extiende por debajo del tendón rotuliano. Este dolor le impedía correr y tuvo que parar durante unos seis meses.

Ese tiempo lo aprovechó para estilizar aún más su cuerpo. El manacorí ha perdido peso para que sus rodillas sufran menos. Comenzó el año 2013 como número 4 del mundo y poco a poco va cogiendo el ritmo necesario. Su primer gran reto de la temporada volverá a ser conquistar Roland Garros.