David Arroyo salva un día sin 'batalla' entre los favoritos

El corredor talaverano tuvo un día tranquilo y pese al peligroso final, una ascensión no puntuable cuyos tres kilómetros finales contaban con pendiente media del siete por ciento, apenas sufrió dado que el resto de aspirantes prefirió no forzar de cara al duro fin de semana.

Tampoco hubo 'batalla' en el duro Passo delle Palade, con rampas del 16 por ciento en el comienzo de esta ascensión. Salvado una jornada más, Arroyo sigue con su ventaja de casi dos minutos y medio sobre Iván Basso (Liquigas) y de más de tres minutos sobre el resto de aspirantes.

Y es que la formación de Basso y Vincenzo Nibali no quiso endurecer el recorrido y sólo al final apareció en la cabeza para acelerar el ritmo, lo que no fue suficiente para descolgar ni a la 'maglia rosa' ni a ninguno de los rivales, también agazapados y reservando fuerzas.

De este modo, los 'aventureros' tuvieron otra oportunidad más en este Giro de Italia. Apenas iniciada la decimoséptima etapa, cerca de veinte ciclistas aprovecharon la relajación dentro del gran grupo para comenzar una fuga exitosa.

Pronto, los escapados, entre ellos los españoles Dani Moreno (Omega Pharma-Lotto) y Vicente Reynes (HTC-Columbia), tomaron una ventaja suficiente para saber que uno de ellos sería el elegido para subir al podio en Peio Terme.

Éste fue el francés Damien Monier, de 27 años y que tuvo sus inicios en el mundo del ciclismo en la pista. El galo aguantó hasta el final y a falta de algo más de diez kilómetros probó fortuna junto al alemán Danilo Hondo (Lampre) y el holandés Steven Kruijswijk (Rabobank).

Los tres abrieron una brecha lo suficientemente grande para frustrar a Moreno, al que le fallaron las fuerzas al final y se tuvo que conformar con acabar en la cuarta posición. Monier, por su parte, atacó a sus compañeros en los kilómetros finales y enfiló hacia la meta, imponiéndose sobre Hondo con casi 40 segundos de ventaja.

Este jueves, los favoritos se tomarán previsiblemente otro 'descanso' de cara a los tres últimas jornadas decisivas. Así, los corredores afrontarán la decimoctava etapa con un recorrido entre Levico Terme y Brescia sobre 156 kilómetros y sin dificultades montañosas.