Djokovic reconoce el empeoramiento de su servicio pero trabaja para mejorarlo

  • Londres.- El tercer favorito en el torneo de Wimbledon, Novak Djokovic, reconoció hoy que su servicio ha cambiado respecto al pasado año, lo que achacó a un "mal hábito" que trata de trabajar para mejorarlo, pero que no le impidió hoy batir al ex número uno del mundo, el australiano Lleyton Hewitt.

Djokovic supera al ex número uno, el australiano Lleyton Hewitt
Djokovic supera al ex número uno, el australiano Lleyton Hewitt

Londres.- El tercer favorito en el torneo de Wimbledon, Novak Djokovic, reconoció hoy que su servicio ha cambiado respecto al pasado año, lo que achacó a un "mal hábito" que trata de trabajar para mejorarlo, pero que no le impidió hoy batir al ex número uno del mundo, el australiano Lleyton Hewitt.

En tres horas y cuatro minutos, Djokovic logró una victoria por por 7-5, 6-4, 3-6 y 6-4 y se clasificó para disputar los cuartos de final ante el taiwanés Yen-Hsun Lu, que eliminó, para sorpresa de todos, al quinto favorito de la competición: el estadounidense Andy Roddick.

Para Hewitt, campeón de este torneo en 2002, y Djokovic, ésta fue su quinta cita y la segunda en Wimbledon desde la acontecida, también en octavos de final, en 2007, cuando se impuso el serbio.

Tres años después Djokovic irrumpió en el All England Club con un servicio que consideró peor por distintos factores, como el cambio de raquetas, y que ya lo ha perjudicado durante la primera parte de esta temporada.

"No he estado sirviendo bien en los últimos seis o siete meses. Hay mucha especulación sobre ello. No quería cambiar, pero simplemente incurrí en un mal hábito. Quizá influyeron algunos factores, como el cambio de raquetas o cosas así", admitió Djokovic.

"Una vez tomas el hábito, es realmente difícil sacarlo de la cabeza, así que estoy trabajando en ello y creo que el servicio irá mejorando", añadió.

En su duelo contra Hewitt, Djokovic se anotó el primer y segundo set del partido, pero cedió en el tercero, cuando el australiano dispuso de todas sus armas y aprovechó las oportunidades que le brindaba el partido, mientras su rival flojeaba.

En esa tercera manga, el serbio tuvo incluso que solicitar asistencia médica y tomar un comprimido, una circunstancia que fue aprovechada por su contrincante.

"Perdí un poco la concentración. Luché contra un poco de malestar en el estómago en ese tercer set. Y él volvió al partido rompiéndome", explicó el serbio, número tres del mundo, que achacó sus síntomas a la falta de oxígeno por no haber controlado bien la respiración.

"Yo no me estaba moviendo bien, no estaba pensando en mi juego, sino en otras cosas. Ya sabes, él utilizó el momento, pero lo positivo es que yo conseguí volver y jugué bien cuando lo necesitaba", añadió.

Djokovic se propuso acelerar el duelo para llegar descansado a los cuartos de final y en el cuarto set desplegó su juego. En el primer juego le rompió el servicio al ex campeón, una hazaña que repitió en el cuarto para embalarse hacia la victoria.

Pero el serbio no menospreció a su contrincante en ningún momento del partido, ni siquiera cuando tenía los dos primeros sets a su favor y todavía no le había arrebatado el tercero, pues sabía que era un "gran luchador" y que "no iba dejarlo pasar".

Finalmente, el tercer favorito pudo sentirme satisfecho de otro juego más en la competición y dijo: "estoy realmente contento con mis actuaciones hasta ahora en Wimbledon. Creo que estoy en el buen camino, jugando lo mejor posible, como he hecho en los dos últimos meses. Sólo espero continuar así".

Por parte, Lleyton Hewitt lamentó que en algunas ocasiones se ve afectado por algo de mala suerte, o por la buena de su contrincante: "siempre necesito un poco de suerte".

"Incluso aunque para Novak, posiblemente esta no es su mejor superficie, él sigue siendo un magnífico jugador, especialmente desde el fondo de la pista", dijo sobre su rival de este lunes.

"(Djokovic) es capaz de eliminar a muchos ganadores en cualquier superficie y se mueve extremadamente bien", dijo.

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