El 2013 ha sido uno de los mejores años de la historia del Villarreal

Javi Mata

Vila-real (Castellón), 23 dic.- El año 2013 se ha convertido en uno de los mejores de la historia del Villarreal, un equipo que logró al final de la pasada campaña el regreso a Primera División y que ha empezado el actual campeonato con fuerzas y situado desde el principio en puestos de competiciones europeas.

El equipo ha recuperado el pulso competitivo habitual en los años previos a su descenso y se ha equilibrado en el aspecto económico con un incremento de su masa social, que alcanza los 20.000 abonados, muchos de los cuales acompañaron masivamente al equipo en los desplazamientos del tramo final de la pasada Liga.

De esta forma, el Villarreal ha cambiado la dinámica de 2012, cuando el equipo no sólo descendió a Segunda División, sino que completó en la segunda mitad del año un primer tramo de Liga en la que siempre estuvo lejos del ascenso que fraguó en la segunda vuelta.

El club presidido por Fernando Roig ha conseguido recuperarse deportiva y económicamente, con un presupuesto que ha pasado de los cien a los cincuenta millones de euros.

El club vendió en 2012 a la mayoría de sus mejores jugadores (Giuseppe Rossi, Borja Valero, Gonzalo Rodríguez o Diego López, entre otros) y apostó por la gente de la cantera y algunos jugadores de peso.

El proyecto del pasado campeonato no funcionó de inicio y en los primeros días de 2013, tras un mal inicio de temporada y con el equipo por debajo de lo que se esperaba, se produjeron algunos cambios que enderezaron el ritmo del Villarreal

Las claves hay que buscarlas en los movimientos de mercado del club, ya que estos fueron definitivos. El primero de ellos, fue el de la llegada de Marcelino García Toral como entrenador.

Su presencia supuso un cambio radical para el equipo, que tras una primera derrota, logró una racha espectacular de juego y sobre todo de resultados.

A la llegada de Marcelino debe sumarse la de varios jugadores, que reforzaron al equipo y lo hicieron de forma vital. Cabe recordar que el club acababa de vender a un jugador como Giuseppe Rossi a la Fiorentina en diciembre, por lo que se había capitalizado.

Con ese dinero y con la idea del técnico, llegaron al club Jeremy Perbet, Chechu Dorado, Francisco Javier Farinós, Javier Aquino o Jonathan Pereira. Todos ellos cumplieron un papel vital en la primera parte del año y en el ascenso.

Así en los primeros cinco meses del año, el Villarreal solo perdió dos partidos de Liga de los veintiuno que disputó, uno frente al Real Madrid Castilla y otro frente al Elche. Así, con un final de Liga espectacular, el equipo logró el ascenso directo en la última jornada de Liga en El Madrigal ante el Almería.

Tras sellar el retorno a la máxima categoría, el Villarreal renovó a su técnico por dos años y reforzó el equipo con la llegada de jugadores como el mexicano Gio Dos Santos, Tomás Pina o Gabriel Armando, entre otros.

Esta segunda parte del año, ha sido buena para el Villarreal. El equipo ha iniciado la primera parte del campeonato como uno de los mejores de la Liga y sobre todo con la obtención de muchos puntos.

Con ellos, el equipo se acerca al primer objetivo de la temporada, el de la salvación, y opta a recuperar el nivel perdido tras el descenso de categoría, tras cerrar el año en puestos europeos y clasificado para lo octavos de final de la Copa del Rey.

A ello se suma que es un equipo competitivo y muy reconocible, bajo la batuta de Marcelino. Algo que más allá de un título, ha sido el gran logro de este año, ya que el Villarreal ha logrado en doce meses volver a ser un equipo con un proyecto sostenible y ambicioso.

Esa es la idea que ha reiterado Fernando Roig, quien ha reconocido que esa es la "idea que guiaba al club desde el primer día.