Sagunto (Valencia), 22 oct.- El Alser visita este fin de semana al Helvetia Anaitasuna de Pamplona, con el que comparte el objetivo de lograr la permanencia y al que se medirá con la moral que supone haber ganado el pasado fin de semana en el primer encuentro de la temporada.
La enfermería del club valenciano permanece llena con las lesiones de Nacho Nebot, la reciente operación de rodilla de Marko Dzokic, y con las molestias de Iago Muiña.
Este jugador es el único que tiene alguna posibilidad de estar en la expedición que el mismo sábado desplazará al Alser hasta Pamplona.
Estas tres bajas y lo ajustado de la plantilla son un lastre para un conjunto que por la escasez de efectivos acumula minutos y desgaste entre sus piezas disponibles.
La victoria de la jornada pasada contra el Naturhouse ha tenido un efecto balsámico para los pupilos de Dzokic, los cuales afrontan los siguientes retos sin la ansiedad de empezar a puntuar.
El refuerzo anímico de este triunfo será unas de las armas que los valencianos esgrimirán en su visita a uno de los escenarios con más historia del balonmano español.
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