Londres, 31 jul.- El judoca brasileño Leandro Guilheiro, cabeza de serie en -81 kilos, solo podrá aspirar a repetir el resultado los bronces obtenidos en Atenas 2004 y Pekín 2008 después de caer en cuartos de final ante el estadounidense Travis Stevens.
El brasileño, que aspiraba alcanzar la final en su tercera participación olímpica, apenas pudo imponer su judo en su combate ante Stevens que consiguió un waza-ari con una proyección de hombro que sorprendió a Guilheiro.
Con el marcador en contra y el tiempo a punto de acabar, el campeón panamericano reaccionó, impuso su agarre y consiguió sacar una advertencia de sanción a su rival aunque fue demasiado tarde.
Previamente, Guilheiro se deshizo en primera ronda del letón Konstantins Ovchinnikovs en un combate inteligente en el que solo precisó dominar el agarre a su rival para que los árbitros lo castigaran con sanciones por falta de combatividad.
En octavos de final se encontró con un rival muy asequible, el marroquí Safouane Attaf, a quien derribó de ippon con una técnica de cadera a los dos minutos de combate.
Después del parón del mediodía, Guilheiro se enfrentará al japonés Takahiro Nakai, que también ha perdido en los cuartos de final, para acceder al combate por el bronce contra quien pierda la semifinal entre el surcoreano Jae-Bum Kim y el ruso Ivan Nifontov.
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