Sevilla, 6 oct.- El Cajasol, entrenado esta campaña por Aíto García Reneses, espera mostrar mañana en Vitoria que lleva una semana más de trabajo y que el equipo sigue en progresión, y con esa intención competirá ante uno de los grandes de la Liga, el Caja Laboral, que se presenta al choque mermado por las lesiones.
La formación sevillana, después de tres ejercicios entrenada por el badalonés Joan Plaza, está ahora en manos de veterano entrenador madrileño, quien ha lamentado el poco tiempo que ha tenido en la pretemporada para desarrollar los nuevos sistemas y además hacerlo sin varios jugadores que tenía compromisos con sus selecciones nacionales.
El lamento de Aíto se tradujo en derrota el pasado domingo en el Palacio de los Deportes San Pablo, cuando el Cajasol inició su caminar por la Liga Endesa y perdió con claridad ante el UCAM Murcia por 77-93.
El pívot valenciano Juanjo Triguero, capitán de la plantilla y el jugador que más campañas lleva (cinco) en el equipo andaluz, ha reconocido esta semana que "todavía hay muchas cosas por pulir".
Triguero ha abogado por sacar la parte positiva del mal partido ante UCAM Murcia y que sirva de revulsivo para luchar mañana "por una victoria que borraría lo del pasado domingo".
Para ello, se cuenta con la aportación del base checo Tomas Satoransky, un joven jugador que ha iniciado su cuarta temporada en el Cajasol y del que se espera que sea fundamental en la dirección del equipo.
Satoransky, además, alcanzará en la cancha del Caja Laboral los cien partidos en la máxima categoría del baloncesto español, todos con el equipo sevillano.
El checo también puede llegar en Vitoria a los quinientos puntos anotados en la ACB, para lo cual necesita conseguir al menos ocho frente a la formación alavesa.
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