El Cuatro Rayas necesita una victoria que le permita soñar con la permanencia

Valladolid, 24 may.- El Cuatro Rayas Valladolid necesita lograr mañana una victoria ante Guadalajara para soñar con la permanencia, si bien ésta no depende solo de que ganen, sino de que además lo haga el Villa de Aranda en Valencia ante el Puerto Sagunto ya que, en caso contrario, se consumaría el descenso de los morados.

Con un triunfo de los valencianos se produciría un triple empate entre éstos, Aranda y el Cuatro Rayas que perjudicaría a los vallisoletanos, con lo que la situación es más que complicada para el conjunto de Nacho González quien, sin embargo, ha asegurado que confía en "los valores del deporte y en la dignidad de los jugadores".

A pesar de que González sí considera que "se han producido resultados raros" en las últimas jornadas, está claro que los vallisoletanos se han colocado al borde del precipicio por su propio pie, con muchas dosis de mala suerte que comenzaron con la lesión a principio de temporada de Pablo Cacheda.

Ésta trastocó todo el sistema del técnico vallisoletano, quien había hecho una clara apuesta por el joven central que, desde que ha reaparecido, ha dado al equipo un cambio radical en cuanto a la fluidez del juego y a la capacidad ofensiva.

Cacheda será una de las piezas fundamentales del Cuatro Rayas para tratar de imponerse a Guadalajara, con el objetivo de "dedicar ese último triunfo a la afición". "A la gente que nos ha apoyado siempre, para brindarles la mejor despedida posible y terminar con la cabeza alta", ha explicado González.

"Es un buen equipo, el que más fácilmente nos sacó de la pista en la primera vuelta, ya que cuenta con grandes lanzadores como el brasileño Valadao, que tiene un tiro espectacular, o los centrales Vigo y Plaza, con un buen lanzamiento a media distancia", ha comentado hoy a Efe.

"Además tienen una defensa 6:0 muy individual y fuerte, por lo que nosotros tendremos que jugar rápido, ser duros cuando vayamos hacia dentro para meter gol, intensos y luchar cada acción", ha añadido Nacho González, quien ha debutado este año en Asobal como el entrenador más joven en la historia de la competición -26 años-.

Ha tenido que hacer frente a la semana más complicada ya que, tal y como ha advertido: "Los jugadores han estado de bajón y se ha hecho especial hincapié en el aspecto psicológico, ya que fue amargo ganar a León para ver cómo Aranda caía ante Gijón, lo que dejaba nuestra permanencia en manos de otros".

Podría ser el último partido del Cuatro Rayas en la máxima categoría del balonmano nacional, en la que ha militado durante 36 años para ser un histórico de Asobal, de ahí que sea una cita "muy especial" para aficionados, para jugadores como Fernando Hernández, Juárez, Paco López o Ávila y para el propio técnico, que ha pasado "media vida" en el club.