Madrid, 26 ene.- El Real Madrid de Pablo Laso quiere mantener el statu quo existente con el Blancos de Rueda Valladolid, que no gana en la capital de España desde hace veinte años, cuando en Pucela jugaba un tal Arvydas Sabonis.
Cualquier dato y estadística que se manejen para este partido, siempre reflejará una abrumadora superioridad para el Real Madrid, único equipo invicto en su cancha de toda la competición.
En 33 visitas, el Valladolid sólo ganó en 3 ocasiones y la última fue hace veinte años, en la temporada 91-92, cuando logró una contundente victoria por 79 a 94, con un equipo liderado por Arvydas Sabonis y Michael Schlegel.
El Madrid ha jugado en las últimas tres temporadas, en la fase regular, un total de 42 partidos en su pista y perdió únicamente en una ocasión, la pasada temporada ante el Bilbao.
Si a esto le unimos que el equipo castellano llega con muchas bajas, las de David Navarro, Ian O'Leary, Cizauskas y Edgar Sosa, que sufre un esguince de grado dos y que viajará con el primer equipo Jonathan Arranz; y que en la primera vuelta, Nikola Mirotic logró 46 de valoración en Valladolid, la mejor marca de lo que llevamos de temporada, la cosa parece clara.
El Real Madrid de Pablo Laso volverá a contar con la baja de Matinas Pocius, que no jugó en Atenas contra el Panathinaikos en la Euroliga, pero la principal preocupación del técnico vitoriano será recuperar a sus jugadores del cansancio del partido y del viaje.
El 'cero' en anotación de Jaycee Carroll en el OAKA y el pasado vallisoletano de Marcus Slaughter jugarán a favor del líder, porque tendrán una motivación extra.
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