El Palau no veía una actuación como la de Navarro desde la de Epi en 1984

  • La actuación del escolta internacional del FC Barcelona Regal Juan Carlos Navarro en el encuentro de anoche en el Palau Blaugrana ante el Real Madrid (96-89) será recordada durante muchos años, no tanto por los 33 puntos anotados y 44 de valoración logrados, sino porque su actuación rayó la perfección.

Barcelona, 31 dic.- La actuación del escolta internacional del FC Barcelona Regal Juan Carlos Navarro en el encuentro de anoche en el Palau Blaugrana ante el Real Madrid (96-89) será recordada durante muchos años, no tanto por los 33 puntos anotados y 44 de valoración logrados, sino porque su actuación rayó la perfección.

El catalán jugó 31 minutos en el que era su 'clásico' número 44. Falló su primer lanzamiento y, a partir de ahí, encadenó 7 de 7 de dos puntos; 5 de 5 de tres y 4 de 4 en tiros libres, añadiendo, además, 6 rebotes (5+1), 3 asistencias y 8 faltas recibidas. En el haber negativo, 4 cuatro pérdidas de balón.

Desde aquellos míticos 54 puntos de Juan Antonio San Epifanio 'Epi', logrados el 18 de febrero de 1984 -en una serie de 24/31 de 2, 0/3 de tres, 6/8 en tiros libres, 6 rebotes, 3 asistencias, 2 recuperaciones y 3 pérdidas en 50 minutos- ante el Joventut (112-109) en un choque que se decidió en la prórroga, no se había visto nada igual en la cancha azulgrana.

A sus 32 años (Sant Feliu de Llobregat, 13 de junio de 1980), Juan Carlos Navarro sigue con el mismo espíritu que cuando debutó y empezaron a llamarle 'La Bomba', un apelativo que no le viene por ese peculiar tiro arqueado. Inicialmente, ese sobrenombre hacía referencia a su capacidad para dinamitar partidos, ya fuese a base de tiros aparentemente insensatos desde ocho metros o de dejadas atrevidas e inesperadas ante contrincantes más altos que él.

Desde hace años arrastra una dolorosa fascitis plantar en el pie izquierdo de la que nunca ha querido ser intervenido, ya sea porque piensa que no le arreglará el problema o porque no se ha querido perder ni Europeos, Mundiales o Juegos Olímpicos que han ido llegando y donde ha escrito páginas históricas: Medalla de Plata en los Juegos de Pekín 2008 y Londres 2012; Campeón del Mundo en Japón 2006 y campeón de Europa en Polonia 2009 y Lituania 2011, donde además fue el MVP del torneo.

Sus 33 puntos de ayer son la mayor anotación individual en un Barça-Madrid desde 1995. Entonces, Arvydas Sabonis marcaba unos asombrosos 41 tantos. El anterior récord personal de Navarro ante el Real Madrid estaba en 30 puntos justo hace 9 años y 2 días (28 diciembre de 2003).

También batió su propia marca de valoración absoluta con sus 44 puntos. Había alcanzado los 43 en un encuentro ante el Breogán en la sexta jornada de la temporada 2005-06. Ese registro no tiene tampoco parangón en un 'clásico' desde que el lituano Sabonis sumara 47 un 12 de marzo de 1995.

Con esos 33 puntos, Navarro suma 6.997, que le dejan a sólo 33 de superar el récord absoluto de puntos logrados con la camiseta azulgrana, que ostenta Juan Antonio San Epifanio 'Epi' desde 1995 con 7.029

Su actuación fue tan extraordinaria que su técnico Xavi Pascual, poco dado a hacer distinciones individuales en el equipo, señaló lo siguiente anoche: "Estuvo brillante en la primera parte y excelso después, en la segunda; es un encuentro que pasará a su historia por una actuación descomunal. Para mí no fue una sorpresa porque se trata de un jugador único en la historia de nuestro baloncesto".

Llegó a las categorías inferiores del FC Barcelona en 1992 y hace cinco semanas se cumplieron los quince años de su debut con el primer equipo azulgrana en la Liga ACB, un 23 de noviembre de 1997.

Desde entonces, ha jugado 529 partidos en Liga ACB, 31 de Copa del Rey, 10 de Supercopa de España, 248 de Euroliga, 3 de Copa Korac y 20 de Liga Catalana.

Su historial con el FC Barcelona es el siguiente: 7 Ligas ACB, 5 Copas del Rey, 2 Euroligas, 4 Supercopas de España, 1 Copa Korac y 7 Ligas Catalanas.

El 21 de noviembre de 2011 renovó por el FC Barcelona hasta 2015, pero con una cláusula especial que le permite prorrogar el contrato "de por vida". Con esta unión con su club de toda la vida, ha asegurado: "Seguro que lo haré. Aún tengo cuerda para rato".

Muy celoso de su vida privada, incluso cuando inició su aventura americana en los Grizzlies de Memphis de la NBA (temporada 2007-2008), Juan Carlos Navarro tiene su gran apoyo deportivo en la afición del Palau, pero el respaldo más grande e incondicional es el de su esposa Vanessa y sus hijas Lucia, de 8 años, y Elsa, de seis, el otro secreto de sus éxitos.

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