El Real Madrid conquista París y pasa a los cuartos de final de la Champions

  • Los blancos se adelantaron con un gol de Cristiano en el Parque de los Príncipes y Casemiro puso la guinda pese al tanto de los parisinos. 
Cristiano Ronaldo celebra un gol ante el Paris Saint-Germain
Cristiano Ronaldo celebra un gol ante el Paris Saint-Germain
EFE

El Real Madrid exhibió su gen competitivo en el Parque de los Príncipes para eliminar al PSG con un gran partido, en el que no sólo defendió la ventaja de la ida (3-1), sino que firmó un 1-2 y empujó al fracaso al nuevo proyecto multimillonario del club parisino.

El equipo blanco se adelantó con un gol de Cristiano Ronaldo, de cabeza, en el minuto 51, empató el Paris Saint-Germain después de que Verrati recibiese su segunda cartulina amarilla, en una acción de mala fortuna para el Real Madrid con un rechace de Casemiro que golpeó en Cavani (m.71), y el conjunto madrileño rubricó la victoria con un tanto de Casemiro (m.80).

El equipo del técnico francés Zinedine Zidane infligió al PSG la primera derrota de la temporada en el Parque de los Príncipes, la primera desde que Unai Emery llegó al banquillo francés. Acabó con un proyecto que se había proclamado favorito a base de millones nunca vistos y dejó al técnico español, que seguirá sin conocer los cuartos de final de la Liga de Campeones, al borde de la destitución.

El Real Madrid apagó el incendio en el primer tiempo, sin mucho esfuerzo, porque el PSG no se contagió en ningún momento de la fiebre de la grada. Y en el inicio del segundo, cuando más empujaban los franceses, mató la eliminatoria con el rutinario gol de Cristiano Ronaldo -doce en ocho partidos-, goleador en nueve encuentros consecutivos.

CR7 y Asensio 

Fue la culminación de una genialidad de Marco Asensio, la apuesta de Zizou ante las bajas del alemán Toni Kroos y el croata Luca Modric en el centro del campo, preferido en esta ocasión a Isco Alarcón, el elegido en la ida. Su pase fue medio gol y la otra mitad la pusieron entre Lucas Vázquez y la cabeza del portugués, que no termina su luna de miel con Europa.

Todo lo contrario que el PSG, que volvió a naufragar en la competición continental. Sin su estrella Neymar, pero sin dar en momento alguno sensación de que podía remontar el 3-1 encajado en la ida. El PSG echó mucho de menos al brasileño. Ninguna de las otras estrellas pusieron picante a su ataque. Todo el mordiente estuvo en la grada, la única que parecía creer. El club había llamado a la guerra, pero el campo de batalla no estuvo en el césped.

El argentino Ángel di María no inquietó, Kylian Mbappé demostró que le falta todavía mucho y Cavani estuvo perdido entre la defensa madrileña.

El centro del campo fue del Real Madrid y sólo algunos errores del brasileño Marcelo dieron alguna esperanza al PSG. Pero fue muy poco, casi nada ante un partido serio del Real Madrid, bien plantado en el campo, con el croata Mateo Kovacic y el brasileño Casemiro reinando en el centro del campo, esperando con calma a que llegara el momento de Ronaldo.

Avisó Sergio Ramos en el 18 con un cabezazo que sacó el meta Alphonse Areola en la línea de gol, y en el 38 de nuevo le sacó un mano a mano al francés Karim Benzema tras un error del brasileño Marquinhos.

Pero fue en el 51 cuando llegó la hora de Ronaldo. Un gol que desquició al PSG. Verratti protestó demasiado al colegiado alemán Felix Brych y vio la segunda amarilla, la que finiquitaba el proyecto del PSG y dejaba expedito el camino de los blancos a los cuartos, en la línea hacia su tercer título consecutivo, el único que se antoja a tiro en esta temporada.

Pero faltaba el ataque de orgullo parisiense, el único del partido, que llegó en una jugada embarullada en el área pequeña que Cavani acabó metiendo. Fue su séptimo gol en la Liga de Campeones esta temporada.

La ocasión de Benzema 

Pero el equipo francés estaba roto, expuesto a los golpes del Real Madrid, que los tuvo en botas de Benzema, fallón de nuevo, y de Ronaldo otra, hasta que llegó el segundo en una tromba madridista, contraste con la pasividad parisiense. Casemiro remachó el partido y Lucas Vázquez pudo ampliar la ventaja si su disparo no se hubiera estrellado en el palo.

Emery entregó la resistencia cuando retiró a Mbappé por Lass Diarra a falta de 6 minutos para el final. El Real Madrid acabó con parsimonia con un proyecto prometedor y puso rumbo a su competición favorita. El infierno no ardió y los cuartos sabrán a gloria en el Bernabéu.

Mostrar comentarios