El Real Madrid en su versión relámpago golea al atrevido Rayo Vallecano

    • Bale regresó con el turbo, le siguieron Sergio Ramos, Kroos con un golazo, Benzema con un tanto en fuera de juego y Ronaldo hizo el quinto
    • El equipo vallecano jugó de tú a tú al líder, presionando arriba, creando ocasiones a Keylor Navas, llegó al descanso con un 2-1 y el partido abierto
Bale vuelve en un Real Madrid lanzado que no quiere retocar su estilo
Bale vuelve en un Real Madrid lanzado que no quiere retocar su estilo
Ulises Sánchez Flor

El Real Madrid es un relámpago con Bale. Así le jugó al Rayo Vallecano. Puso un ritmo alto al juego, le dio velocidad a sus acciones, verticalidad y explosividad. Nada de calma. Sin Isco hay menos elaboración y pausa. Hay quien echa de menos un pase atrás para volver a empezar la jugada. Con Bale se juega con el turbo. Ocho minutos tardó el galés en romper el partido. Fue en una jugada en la que Kroos robó cerca del área, combinó con Cristiano Ronaldo y el alemán centró para que rematara Bale llegando como un Fórmula 1 desde atrás.

Espectacular el inicio del partido del galés. El primer balón que tocó fue un taconazo de primeras, poco después robó una pelota en el medio del campo y enseguida hizo el gol. En poco tiempo se comprobó que el Real Madrid de la zancada larga no tiene nada que ver con el de fútbol de salón que enamoró en Anfield y en Granada. En ese once estaba Isco y su asociación con James y Benzema, sobre todo, puso el acento en el toque. Con Bale también se disfruta. De otra forma. Es como pasar de bailar un paso doble a rock and roll.

Fue un partido de área a área, como se esperaba, porque Paco Jémez lanzó a su equipo arriba, cerca de la portería de Keylor Navas, para buscar la presión. Para algunos es un equipo suicida y para otros valiente. Lo que sí está claro es que el Rayo tiene identidad y no la cambia sea quien sea el rival. Ese planteamiento benefició el juego del contraataque del Real Madrid. Había espacios y Cristiano Ronaldo y Bale querían sacar partido de ello. Una de esas contras la frenó Fatau derribando al portugués y el árbitro miró para otro lado. Jugada para la polémica.

El partido estaba abierto. El Rayo también quería ser protagonista y llegaba por las bandas, poniendo centros a Baptistao, y con disparos lejanos de Kakuta y Bueno. Éste último exigió a Navas, que hizo una buena parada. Benzemarespondió y mandó una pelota al larguero. En este ir y venir creó más ocasiones el Real Madrid con disparos de James y Cristiano Ronaldo. Uno de ellos, en un tiro del colombiano, intervino Cristian para enviar la pelota a córner. Lo sacó James y apareció Sergio Ramos para marcar el dos a cero. Golpeó el balón con la rodilla. Le sale todo. Era el minuto 40 y parecía que estaba cerrado el partido. Pero el Rayo no se rindió. Siguió presionando arriba y en un saque con las manos de Keylor Navas sobre James provocó el error del colombiano. Alberto Bueno se aprovechó para marcar un tanto que dejaba con esperanzas a los vallecanos.

En la segunda parte siguió el atrevimiento del Rayo para buscar el empate. Se fue a por ese gol y, en otra jugada para la polémica, se le anuló un gol a Baptistao. El brasileño está ligeramente adelantado y en fuera de juego. La respuesta, en la siguiente jugada del Real Madrid, fue correr más que su rival y en una incursión de Cristiano Ronaldo el balón acabó cedido atrás. Llegó Kroos para golpearle con potencia, precisión e intención con el interior del pie derecho. Le salió una rosquita perfecta. Un golazo. El primero que marca.

Era el minuto 56 y el Real Madrid se lanzó a por más. Era ya un equipo que atropellaba y, tres minutos más tarde, fue Benzema el que marcó el cuarto. Lo hizo en fuera de juego. Hubo minutos para Isco. Ancelotti quitó a James y metió al malagueño a falta de más de veinte minutos. El que no se podía ir sin marcar era el Bota de Oro. Cristiano Ronaldo lo buscó con insistencia y tuvo la fortuna de su lado. Otra contra fulminante que finalizó el luso con la ayuda de Cristian. Al portero ya se le doblaban las manos, desgastadas de tanto trabajo.

El Real Madrid defendió su liderato con la energía de un equipo que transmite buenas sensaciones. Se muestra seguro en todo lo que hace, tiene confianza, es eficaz y equilibrado.Cristiano Ronaldo lleva 18 goles en la Liga. Asusta.

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