El Real Madrid, tres meses de ensueño para mandar una Liga más equilibrada

  • La Liga española de fútbol 2014-15 llega a su ecuador con el Real Madrid al mando después de tres meses de ensueño, en los que enlazó doce victorias consecutivas, y con la sensación de mayor equilibrio, de mayor cercanía entre los tres grandes y la que se puede considerar segunda unidad, representada esta campaña por Sevilla, Valencia, Villarreal y Málaga.

Madrid, 19 ene.- La Liga española de fútbol 2014-15 llega a su ecuador con el Real Madrid al mando después de tres meses de ensueño, en los que enlazó doce victorias consecutivas, y con la sensación de mayor equilibrio, de mayor cercanía entre los tres grandes y la que se puede considerar segunda unidad, representada esta campaña por Sevilla, Valencia, Villarreal y Málaga.

La primera vuelta liguera no se pondrá al día hasta que se juegue el 4 de febrero el aplazado Real Madrid-Sevilla, por la disputa del conjunto de Carlo Ancelotti del Mundial de Clubes.

Pese a ello, el equipo blanco, que arrancó muy dubitativo con dos derrotas seguidas en Anoeta contra la Real Sociedad y en el Santiago Bernabéu ante el Atlético, encontró una velocidad de crucero constante al ritmo de una mejoría palpable en el juego, correspondida con la pegada arriba que lidera Cristiano Ronaldo y mayor seguridad atrás. Es líder desde la décima jornada.

El Real Madrid es el equipo máximo goleador, con 62 dianas, 14 más que el Barcelona, y el segundo que ha encajado menos tantos, quince, por los nueve del equipo de Luis Enrique, que tiene al chileno Claudio Bravo a la cabeza de los porteros de la Liga.

Cristiano Ronaldo de momento suma 28 goles, con lo que, a falta de ese encuentro frente al Sevilla, ya ha igualado el récord de la primera vuelta que ostenta Leo Messi, que con su triplete en Riazor acumula 19. El duelo de artilleros entre los dos mejores jugadores del mundo está más vivo que nunca, pero de momento se decanta por el luso.

El brasileño Neymar (12) y el uruguayo Luis Suárez (2), este aún en fase de adaptación a la Liga y a su equipo tras estrenarse más tarde por la sanción de la FIFA, componen el tridente ofensivo azulgrana, la alternativa a la BBC madridista que completan el galés Gareth Bale (9) y el francés Karim Benzema (8).

El equipo de Ancelotti, a falta de ese encuentro contra el Sevilla, ha sumado dos puntos menos que en el pasado curso, pero a la par el Barcelona y el Atlético de Madrid han conseguido seis y nueve menos.

De hecho el Atlético ya ha perdido tantos partidos (4) como en toda la Liga pasada. Pese a lo cual, los de Simeone mantienen la competitividad que les hizo campeones el curso precedente y están en disposición de volver a pelear por el título con el Real Madrid y el Barcelona, que pese a las críticas a Luis Enrique y a ciertos problemas puntuales está de lleno en la pelea.

Mientras tanto, Sevilla, Valencia y Villarreal se niegan a resignarse a una Liga de tres. Al contrario, hasta el momento compiten casi de igual a igual.

El Sevilla, único equipo de la Liga invicto como local, es cuarto a tan solo dos puntos del Atlético y podría, de ganar en el Bernabéu, incluso situarse segundo a tan solo tres puntos del Real Madrid. Por el momento, ya ha hecho una primera vuelta histórica pese a tener que renovar una vez más a buena parte de la plantilla.

El Valencia de Nuno, en el estreno del proyecto del empresario singapurés Peter Lim, ha cerrado la mejor primera vuelta desde 2010. Pese a algunos tropiezos, mantiene una línea para la esperanza y además ha dado la cara notablemente ante los grandes. Encabezó la tabla en la quinta jornada y no ha bajado desde entonces del quinto puesto.

El Villarreal vive sus mejores momentos de la campaña. Está enrachado y su ascensión ha sido constante en la última etapa. Se ha situado sexto a tres puntos del Valencia cada vez más afianzado.

El otro aspirante a plazas europeas es el Málaga. Con Javi Gracia en el banquillo el equipo andaluz solo ha cedido en los últimos encuentros, pero aún tiene el sueño europeo al alcance.

El Eibar se ha ganado, sin duda, el derecho a ser considerado el equipo revelación. En el año de su debut en la categoría de oro, navega con solvencia y hasta buen fútbol a continuación de los equipos que pugnan por Europa.

En el lado negativo, sobresale la mala temporada de equipos como el Athletic y la Real Sociedad, instalados muy cerca (tres puntos) de la zona roja de máximo riesgo, que, a día de hoy, ocupan Granada, inmerso en una racha interminable de partidos sin ganar (15 encuentros), Levante y Almería.

Getafe, Elche y Deportivo tienen tan solo un punto de margen y el Córdoba dos. Las distancias son aún muy cortas y se avecina una emocionante y dura pugna por la supervivencia.

La primera vuelta ha deparado seis relevos en los banquillos. La ruleta comenzó tras la octava jornada con Albert Ferrer y José Luis Mendilíbar en el Córdoba y el Levante, a los que llegaron el serbio Miroslav Djukic y Lucas Alcaraz, respectivamente.

Jagoba Arrasate aguantó diez encuentros al mando de la Real Sociedad, de la que se hizo cargo el escocés David Moyes, extécnico de Everton y Manchester United.

Juan Ignacio Martínez volvió a los banquillos de Primera en el Almería como relevo de Francisco Rodríguez y ya en 2015 Cosmin Contra se fue al fútbol chino y el Getafe recurrió a Quique Sánchez Flores y Joaquín Caparrós, otro histórico, no soportó la mala marcha del Granada, que curiosamente tuvo un inicio de temporada ilusionante, pero se atascó sin, hasta ahora, encontrar solución.

En el aspecto estadístico, el Real Madrid protagonizó el partido con más goles y la victoria más amplia fuera de casa con el 2-8 que le endosó al Deportivo en la cuarta jornada y que significó el punto de inflexión para el cuadro de Ancelotti. Así mismo, es el único que no ha empatado aún partido alguno.

El Barcelona tiene en su haber la mayor victoria como local, merced al 6-0 conseguido ante el Granada en la sexta jornada. Además, estuvo las ocho primeras jornadas sin encajar gol alguno. Recibió el primer tanto en la novena en la derrota ante el Real Madrid (3-1). Cristiano Ronaldo, de penalti, fue el primero que batió a Claudio Bravo.

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