El tesoro de los velocistas, las etapas llanas

José Luis Sorolla

Logroño, 4 sep.- A los velocistas en la Vuelta les cuesta encontrar en los últimos años el tesoro que mejor saben buscar, las etapas llanas en las que obtener su rendimiento máximo a sus explosivas cualidades anaeróbicas.

La carrera española ha encontrado una de sus fuentes de atracción y un espectáculo prácticamente inexplorados en las llegadas en rampas de porcentajes imposibles, como Valdepeñas de Jaén, San Lorenzo del Escorial o el mirador de Ézaro entre otros, o con puertos a escasos kilómetros de la llegada como el cordobés del 14 % que dejan fuera a los especialistas.

Ese hallazgo ha complicado sobremanera la vida de los velocistas puros en una gran prueba por etapas como la Vuelta, aunque el Tour y el Giro todavía no han copiado al cien por cien la idea, acostumbrados como estaban a marcar sus objetivos con un buen número de cruces que ahora se han reducido drásticamente. Sus posibilidades son escasas y hay que "aprovecharlas al cien por cien"

El mallorquín Vicente Reynes (IAM Cycling), segundo en Córdoba en una etapa en la que se vio superado solamente por el alemán John Degenkolb (Giant), intratable y con dos victorias en su haber, también lo ve así.

"En esta Vuelta en la primera semana es en la que teníamos más oportunidades los velocistas, en Logroño es para velocistas puros y mi trabajo es para mi compañero Matteo Pelucchi y a partir de ahí solo creo que volveremos a tener opciones en las llegadas de Coruña y Cangas de Morrazo, dos etapas de media montaña. Eso si, también habrá que estar pendientes de las fugas consentidas", analizaba para Efe el mallorquín de Deyá.

En su opinión la Vuelta centra su apuesta en las jornadas de media montaña y renuncia "a las etapas para los más rápidos", algo que "de momento no hacen ni el Giro ni el Tour, donde disfrutan de más oportunidades".

Para todos los participantes en la carrera española, el circuito de Logroño es "superfácil" lo que supone un notable incremento de la tensión en el pelotón aunque afortunadamente la meteorología, tanto en forma de viento como de lluvia, les ha respetado.

Otro aspecto que obliga a "aprovechar al límite todas las oportunidades" es la crisis de la que los equipos sacan partido obligando a sus ciclistas a "vivir al cien por cien entregados al ciclismo y a pedirnos resultados todo el año" y por eso, según Reynes, "no resulta fácil mantenerte en el pelotón".

Otro especialista nacional en los sprint es Koldo Fernández de Larrea, también en un equipo extranjero como el Garmin-Sharp, quien señala que ya no se mete con asiduidad en este tipo de llegadas aunque también recuerda que en 2007 en este mismo escenario solo se vio superado por Óscar Freire, en otra llegada masiva de la Vuelta, y "a lo mejor lo intento".

"En los últimos años, la Vuelta se ha centrado más en las llegadas que pican hacia arriba y en los finales en alto porque son los que crean más expectación entre los aficionados", argumentaba en declaraciones a Efe.

En lo que no alberga ninguna duda es que la jornada de la capital riojana es "la última oportunidad" para los más rápidos y en la que lo normal es que se resuelva al esprint porque "hay equipos interesados como Giant o Francaise Des Jeux, mientras que otros, como los equipos que aspiran a ganar como Tinkoff-Saxo o Movistar se lo tomarán con más tranquilidad".

De manera un poco diferentes se ven las cosas desde el coche del Orica GreenEdge, como es el caso del australiano afincado en España Neil Stephens, quien considera que se trata de "un recorrido muy equilibrado en el que hay opciones para todos y un 25 % de las etapas se han resuelto al esprint que es suficiente".

Su análisis también se ve condicionado por contar entre sus corredores con un especialista como su compatriota Michael Matthews, vencedor en Arcos de la Frontera, porque "pasa la media montaña y está donde algunos ya se han quedado fuera y todavía le quedan algunas oportunidades".

Hasta el momento John Degenkolb con tres victorias, Nacer Bouhanni (Francaise Des Jeux), con dos, y Michael Matthews, una, han sido los dominadores en esta especialidad que parece a extinguir para algunos.