El Tour espera a Contador

Luis Miguel Pascual

Nancy (Francia), 11 jul.- El Tour de Francia está a la espera de Alberto Contador. Pese a la diferencia de más de dos minutos y medio que le separa del líder, el italiano Vincenzo Nibali, el español sigue siendo el gran favorito de la edición tras la retirada del británico Chris Froome.

Anunciado como un duelo entre Froome y Contador, el 101 Tour se ha convertido ahora en un mano a mano entre el español y Nibali, con ventaja provisional para el italiano.

"Pero queda mucho Tour por delante, muchas llegadas en alto y una contrarreloj en la que Contador tiene ventaja", analiza el director del equipo Trek, Alain Gallopin.

Es una opinión generalizada en la caravana que sigue la carrera, que se encuentra a las puertas del macizo de los Vosgos, la última invención de los organizadores, una nueva dificultad montañosa que se suma a Alpes y Pirineos, y que da picante a la competición.

Serán tres etapas que comienzan mañana, sábado, y que valdrán como primer gran test para conocer el verdadero estado de fuerzas de los favoritos, con la llegada el lunes a La Planche des Belles Filles, de primera categoría, como plato fuerte.

Nibali logró su ventaja en la etapa de los adoquines, donde Contador tuvo una actitud defensiva y privilegió llegar sano y salvo aunque eso supusiera ceder algo de renta, analiza Gallopin.

"Fue la táctica inteligente, dado que Nibali es un ciclista muy hábil, sobre todo con lluvia, y que queda mucho por delante", señala.

Las calculadoras han comenzado a echar humo. Contador debe recuperar medio minuto en cada una de las cinco llegadas en alto que quedan por delante para enjugar el retraso que tiene con Nibali y jugarse el Tour en la contrarreloj del penúltimo día.

"Todavía no ha empezado la montaña, soy totalmente optimista sobre las opciones de Alberto", asegura el director del Tinkoff, Bjarne Riis.

En el clan de Contador la retirada de Froome no ha cambiado los planes. El rival a batir es otro, pero el escenario de las batallas sigue siendo el mismo.

Tanto en el Giro de 2011, donde en los grandes "coles" Contador distanció de 7 minutos a Nibali, como en la pasada Dauphiné, donde la diferencia fue de más de dos minutos, el madrileño ha demostrado siempre que en los grandes puertos es superior al italiano.

"De lo que no hay duda es de que Contador va a atacar y eso es lo que va a marcar la carrera", confiesa el jefe del Sky, Dave Brailsford.

La duda está ahora si el madrileño lanzará su zarpazo en los Vosgos, esperará a los Alpes, a partir de la segunda semana, o lo dejará para los Pirineos en la definitiva.

"A Contador le gustan los puertos más duros, no creo que en La Planche des Belles Filles haya muchas diferencias entre Contador y Nibali", señala Gallopin.

Los Vosgos, sin embargo, pueden tener como consecuencia un desgaste de Nibali y de su equipo, el Astana.

El director del equipo, Giusseppe Martinelli, no para de repetir que no verían con malos ojos que otro ciclista se hiciera con el amarillo, porque Sky ya no asegurará el control de la carrera y eso les hace heredar el peso sobre sus hombros.

El propio Nibali, tradicionalmente impulsivo y espontáneo, se ha creado un caparazón que le aisla de su antigua personalidad y que parece dotarle de un carisma nuevo que se lleva muy bien con el amarillo.

"Claro que me atacarán, pero yo también puedo hacerlo si tengo oportunidad", asegura el de Messina, más acostumbrado a plantear las carreras desde una posición ofensiva que defensiva.

Sin olvidar que el italiano deberá también enjugar, desde el liderato, otros peligros.

Heridos por las caídas y algo distanciados en el pelotón, los estadounidenses Andrew Talansky y Tejay van Garderen intentarán recuperar algo de las rentas cedidas, al igual que Alejandro Valverde, un especialista en las clásicas que puede sacar partido de su punta de velocidad en los puertos más suaves de los Vosgos.

Sin olvidar que el australiano Richie Porte es ahora el jefe de filas de la potente formación Sky. "Tiene buena forma y está muy ilusionado con ir a por el Tour. Debe buscarlo con todas sus fuerzas", indica su director.

"El peligro puede venir de cualquier lado, habrá que estar muy atentos", sentencia Nibali.