"No seleccionable": ese es el estatus del máximo goleador en activo del combinado galo (27 goles) cuando ya se divisa en el horizonte el torneo continental que tendrá lugar del 10 de junio al 10 de julio.
Acusado de "complicidad en tentativa de chantaje" y de "participación en asociación de malhechores" por presunto chantaje sobre Valbuena, el jugador del Real Madrid ha metido a la Federación Francesa en un barrizal de consecuencias imprevisibles, resucitando los fantasmas del Mundial de Sudáfrica 2010 (huelga de jugadores) y siendo expulsado de la selección mientras su situación judicial no evolucione.
Un enorme lunar para un equipo que recuperó el crédito gracias a su buen Mundial 2014, y cuya resolución dependerá del veredicto de la justicia gala.
La Federación Francesa escruta a conciencia cada dosier judicial. El recibido el 18 de febrero abrió la puerta a la esperanza. La juez de instrucción Nathalie Boutard decretó el levantamiento parcial del control judicial del jugador, lo que suponía el fin de la prohibición de entrar en contacto con Valbuena.
"Por ahora no es seleccionable. No ha habido cambios por lo que no está a disposición de Didier (Deschamps, el seleccionador). Pero espero que la evolución judicial sea positiva. Podría haber un anuncio el fin de semana o la semana que viene", señaló este martes el presidente de la federación Noël Le Graët.
El horizonte de Benzema parece más despejado, pero no significa que la FFF pueda cantar victoria.
Deschamps se encuentra también a la espera. "Es un primer paso, pero la fiscalía ha recurrido. A día de hoy, aún no es seleccionable", declaró en la cadena Canal+ el 22 de febrero.
La duda estriba en saber si la FFF reintegrará a Benzema en el grupo en caso de levantamiento definitivo del control judicial, aunque el jugador siga estando imputado.
En el plano estrictamente deportivo, su regreso es lógico. No tiene rival que le haga sombra en la delantera. Vive una de sus mejores temporadas a nivel individual con 23 goles en 24 partidos con el Real Madrid
Pero en términos de imagen las consecuencias podrían ser desastrosas. La presión popular y política es grande sobre la FFF y los Bleus, aún más expuestos al ser anfitriones del torneo. Cinco años después del fracaso del Mundial de Sudáfrica y la famosa huelga en un entrenamiento, Francia no toleraría otro escándalo.
El pasado 1 de diciembre el primer ministro Manuel Vals no dudó en pronunciarse en contra de la convocatoria del jugador. Las encuestas de opinión van en la misma línea: siete de cada diez franceses se muestran contrarios a la presencia del delantero en el combinado nacional.
Su lesión en el muslo y su probable baja para los compromisos amistosos del 25 y del 29 de marzo ante Holanda y Rusia respectivamente suponen una alivio para la FFF, que gana así tiempo antes de tomar la decisión definitiva.
Tranquilizado por el asequible grupo que le ha tocado en primera fase (Rumania, Albania, Suiza), el pragmático Deschamps ha probado ya a varios candidatos a sustituir a Benzema y/o a Valbuena (Gignac, Lacazette, Ben Arfa, Coman, Ntep, Fekir...).
Además, el trío de ataque Griezmann-Giroud-Martial, brilló en el amistoso ante Alemania (2-0), el 13 de noviembre.
Aún quedarán por delante dos partidos, ante Camerún (30 de mayo) y Escocia (4 de junio), y dos 'stages' preparatorios, en Holanda y Austria, para realizar probaturas antes de la puesta de largo oficial ante Rumania el 10 de junio en el Estadio de Francia, con la presencia de Benzema aún en el alero.
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