La enésima lección de educación que dejó Japón tras la derrota ante Bélgica

  • Tras pasar la fase de grupos gracias al 'fair play', los nipones volvieron a dejar impronta de su grandeza tras ser eliminados por los belgas.
Bélgica gana en el último minuto
Bélgica gana en el último minuto

En este Mundial del VAR, la emoción y las sorpresas, desde la eliminación de Alemania en la fase de grupos a la caída prematura de España por la parte 'limpia' del cuadro, una de las selecciones que también deja huella en este torneo celebrado en Rusia es Japón. En lo deportivo, su clasificación a octavos de final fue la primera que se decidió por el criterio del 'fair play', eliminando a Senegal por haber recibido menos tarjetas amarillas.

Pero Japón también fue un ejemplo en las gradas. Pese a caer de forma cruel en el último suspiro de partido, tras conceder una contra que resultó letal y que suponía la culminación de la remontada por parte de Bélgica, los aficionados nipones volvieron a demostrar su pulcra educación y su máximo respeto al lugar por donde pisan, sea cual sea este. Mientras rumiaban la derrota, una ingenuidad imperdonable, los aficionados japoneses se dedicaron a recoger la suciedad de sus gradas, dejando impoluta las gradas en las que vieron la derrota ante los belgas.

No sólo fueron los aficionados los que dieron un ejemplo impecable de educación y respeto. Los jugadores, destrozados tras ver como se les escapaba la clasificación cuando la tuvieron en la punta de los dedos, también recogieron su vestuario y lo dejaron tal y como se lo habían encontrado apenas unas horas antes al llegar al estadio Arena de Rostov. Una actitud que no pasó desapercibida para la propia FIFA, que en boca de su Coordinadora General, Priscilla Janssens, calificó al equipo nipón como "un ejemplo para el resto de equipos", agradeciendo su actitud. " Ha sido un ejemplo trabajar para ellos".

Vestuario de Japón tras caer ante Bélgica. / Twitter @priscillaboca
Vestuario de Japón tras caer ante Bélgica. / Twitter @priscillaboca

Un gesto que ya se repitió en la fase de grupos, en este caso, además de por la afición japonesa, por la afición de Senegal. Tanto los nipones presentes en el estadio Arena Mordovia, en el encuentro de Japón frente a Colombia, como los senegaleses, en el duelo frente a Polonia, que acudieron a Luzhniki se dispusieron a recoger todos los plásticos, comida, bebida y en definitiva todos los restos de basura que habían quedado en las tribunas tras su presencia en las mismas. El gesto se convirtió rápidamente en viral en las redes sociales con vídeos donde los usuarios aplaudieron la educación de ambas aficiones por igual.

Una muestra más de que la pasión que desprende el fútbol no está reñida con la buena educación. Un ejemplo, el de japoneses y senegaleses, que debería hacer reflexionar a muchos aficionados cuando acudan a un campo de fútbol.

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