San Sebastián, 5 nov.- Asier Santana, el entrenador interino que dirigirá por un solo partido a la Real Sociedad contra el Atlético de Madrid hasta la llegada del técnico definitivo, se ha convertido en una experiencia única en el club donostiarra, que nunca había utilizado esta fórmula tras la destitución de un preparador mediada la temporada.
El historial en salidas de entrenadores ha sido profuso en la Real en los últimos 20 años y los cambios sobrevenidos frecuentes, signo de que los resultados no estaban a la altura de las expectativas.
El entrenador que menos tiempo ha durado en la historia reciente realista fue Periko Alonso, padre del actual centrocampista del Bayern de Múnich Xabi Alonso, y que duró en el puesto 10 jornadas para dejar el puesto voluntariamente y ser sustituido por John Toshack.
La destitución del técnico galés en el tramo final de la temporada 2001-2002 la resolvió rápidamente el club donostiarra con el ascenso de Roberto Olabe, entrenador del equipo juvenil y por tanto integrado en las categorías inferiores de la Real como ahora Santana, pero no fue flor de un día, sino un encargo para los tres últimos meses de competición.
En la campaña 2005-2006, con el cese de José María Amorrortu, el club tuvo que tomar también una decisión complicada y fichó a Gonzalo Arkonada, que estuvo dos meses en su cargo para dejar el tramo final de la Liga a José Mari Bakero, quien salvó al equipo del descenso.
Ahora Santana tiene un plazo de caducidad que se agota con el partido del Atlético de Madrid y luego será el entrenador titular quien dirija los destinos de la Real el resto de la temporada.
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