Pocos podían imaginar que Corea fuera a dar tantos problemas. Los 'Tigres de Asia', como se conoce a los surcoreanos, aguantaron bien a la selección española durante la primera parte. Encarrados atrás, intentando jugar a la contra, aunque tocando si se les dejaba, obtuvieron el premio del gol justo antes del descanso.
En medio de esa maraña de jugadores blancos se movían Mata, Silva y Cazorla con la idea de surtir de balones a Torres. Por detrás, y dándole cordura al sistema, Alonso y Beñat. El del Betis aprovechó la libertad de movimientos que le dio Del Bosque en su debut como titular en la selección. Tanto es así, que en una de sus apariciones por la derecha acabó asistiendo a Torres en el primer gol.
Precisamente el 'Niño', fue otro de los destacados del combinado nacional. Se nota que Fernando tenía ganas de volver a jugar con la selección, de jugar a atacar y no a defender, como le ocurre en el Chelsea. Desde el primer minuto buscó el balón, tiró desmarques e intentó ganarle la espalda a la defensa.
Así fue como en el minuto 13 de partido en 'Niño' fue más listo que su central y, ganándole la espalda, fue capaz de rematar de cabeza un preciso centro de Beñat.
Lo que ha unido Silva, que no lo separe nadie
Pero si Beñat hacía daño sorprendiendo desde el medio y Torres percutía en la defensa como un cuchillo en la mantequilla, entre media estaba Silva para unir a uno y otro. El canario apareció como ese jugador capaz de darle una inquietante pausa al partido cuando el balón está en la frontal del área.
Así, con esa tranquilidad y con esa majestuosidad típica de los jugones, era capaz de encontrar huecos en la muralla defensiva coreana. Quizá por eso fue el único de los cuatro de arriba que disputó todo el partido.
Festival ofensivo en la segunda parte
Pese al buen hacer de Beñat, Silva y Torres, el partido llegó empatado al descanso merced a un golazo de Do-Heon al filo del descanso. El coreano recibió en la frontal y, sin pensarlo dos veces, disparó a portería. El balón se acabó metiendo por la mismísima escuadra.
Del Bosque aprovechó el partido para dar minutos y sacó en la segunda parte a los tres delanteros que tenía en el banco. Soldado era el '9', con Negredo de enganche y Adrián en la banda. España volvió a dominar y, esta vez, con tant autoridad que los coreanos apenas inquietaron la meta española en el segundo tiempo.
Pronto se vio recompensado el esfuerzo español. Un penalti transformado por Xabi Alonso y una falta magistralmente lanzada por Cazorla por debajo de la barrera abrieron una brecha definitiva en el marcador.
De ahí en adelante, la selección se dedicó a controlar, a seguir elevando confianza y a esperar pacientemente, por si llegaba algún gol más. Negredo, a pase de Soldado, puso la guinda al partido con un cuarto gol que mete más leña al fuego en el debate sobre el delantero titular de la selección.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios