España calibra su puesta a punto para el Europeo ante la rocosa Hungría

  • La selección española de balonmano calibrará su puesta a punto para el próximo Europeo de Dinamarca 2014 con un doble enfrentamiento con Hungría, mañana (16:00) y el sábado a la misma hora en Debrecen, en los que el conjunto español tratará de hacer valer su condición de vigente campeón mundial.

Redacción deportes, 31 oct.- La selección española de balonmano calibrará su puesta a punto para el próximo Europeo de Dinamarca 2014 con un doble enfrentamiento con Hungría, mañana (16:00) y el sábado a la misma hora en Debrecen, en los que el conjunto español tratará de hacer valer su condición de vigente campeón mundial.

Para ello, el seleccionador Manolo Cadenas confiará en el mismo bloque que el pasado mes de enero se ciñó en Barcelona su segunda corona universal, tras la baja de última hora del joven Alex Dujshebaev, sustituido por Ángel Montoro, al que un inoportuno esguince de tobillo le impedirá debutar con la selección absoluta.

"Obviamente los partidos amistosos no tienen el rigor de la competición, pero Hungría es una gran selección y querrán ganar ante su público a los vigentes campeones del mundo, pero nosotros estamos obligados a competir al más alto nivel y demostrar por qué logramos el cetro universal", señaló Cadenas en declaraciones a la página web de la Federación Española.

Una responsabilidad que impedirá al conjunto español esconder ninguna de sus cartas, pese a que Hungría será el primer rival de la selección en el próximo Campeonato de Europa, en el que España además de con los magiares se enfrentará en la primera fase con Islandia y Noruega.

"No tengo miedo a que puedan ver nuestro tipo de juego. Todos nos conocemos perfectamente y sabemos que cada partido es distinto. Nosotros vamos a jugar lo mejor que podamos, utilizando los recursos que tenemos", explicó el seleccionador español.

En este sentido, Manolo Cadenas no ocultó su intención de probar ante los magiares distintas soluciones tácticas como la defensa 5-1 con los extremos Víctor Tomás y Cristian Ugalde en la posición de avanzado.

Una fórmula que ya resultó clave, entonces con Aitor Ariño en el puesto de avanzado, para que la selección española pudiera doblegar por 22-28 Hungría en el encuentro de la primera fase del pasado Mundial de España 2013, la última ocasión en la que se han enfrentado ambos equipos.

Defensa contra la que Hungría, semifinalista en los Juegos Olímpicos de Londres, parece contar con cada vez más recursos para contrarrestar, gracias a la riqueza táctica que le aporta el exbarcelonista Laszlo Nagy, así como por la cada vez mayor presencia de técnicos y jugadores españoles en la Liga magiar.

La "españolización" del balonmano húngaro con la llegada de Antonio Carlos Ortega y Juan Carlos Pastor a los banquillos del Veszprem y Pick Szeged, los dos "grandes" del campeonato, dota de una mayor variedad táctica a una selección ya sobrada de poderío físico y talento con la presencia de jugadores de la talla de Laszlo Nagy, el central Gabor Csaszar o el pivote Szabolcs Zubai.EFE.

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