España pierde parte de su prestigio en Lisboa

  • La selección española sucumbió ante Portugal por un doloroso 4-0 tras un mal partido en el que apenas dejó vestigios de las virtudes que les llevó a proclamarse campeona del mundo. España se vio superada por intensidad e implicación, y demuestra que desde el Mundial los amistosos no se le den bien (dos derrotas y un empate).
Portugal v Spain - International Friendly
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Aitor Amorós

Con menos de media entrada en el Estadio da Luz de Lisboa, el partido se presentaba como un amistoso frío, entre viejos conocidos que buscan convencer a la FIFA para que les designe la organización del Mundial 2018. Pero pronto se vio que no sería así, que las rencillas entre unos y otros, especialmente entre Cristiano Ronaldo y los internacionales españoles del Barcelona, calentarían el encuentro.

Avisó pronto Nani de las intenciones lusas, con un ajustado disparo en el primer minuto que obligó a Casillas a realizar una espectacular parada. Los tambores de guerra sonaban cuando se produjo el doble encontronazo entre Busquets y Ronaldo. Golpeó primero el azulgrana, con una fuerte entrada que dejó dolorido al portugués en su pierna izquierda. El jugador madridista, una vez recuperado, no dejó escapar la primera oportunidad que tuvo para devolverle el 'recadito'. Ambos se ganaron la tarjeta amarilla, pero dieron vida al partido.

No logró España desplegar el juego que acostumbra. Los de Del Bosque no abandonaron el concepto de tocar y combinar, pero lo hicieron con precipitación, les faltó una pausa, les faltó Xavi, desaparecido los minutos que estuvo sobre el campo. Asumieron la responsabilidad Silva e Iniesta, pero el flujo ofensivo no fue el de otras ocasiones, y Villa fue el que más lo notó: el asturiano no pudo desmarcarse de Raúl en la tabla de máximo goleadores de 'la Roja'.

Portugal sacó provechó del ir y venir en el que se convirtió el partido, ya que tiene jugadores como Ronaldo, Meireles o Nani que tienen las condiciones perfectas para contragolpear. El primer aviso lo tuvo España en una excepcional jugada de el delantero madridista, quien tras dejar a Piqué en el suelo con un recorte, superó con una vaselina a Casillas, pero Nani remató de manera innecesaria, porque el balón entraba, sobre la línea de gol. El árbitro interpretó que el del Manchester United estaba en  fuera de juego y lo anuló, ante la desesperación de su capitán.

El segundo aviso llegó apenas un minuto después, cuando Piqué sacó bajo palos un remate de Martins que olía a gol. A la tercera llegó la vencida, cuando ya se divisaba el descanso. La jugada la cocinó Ronaldo, con un recorte a Busquets dentro del área y un fuerte disparo que repelió Casillas, pero en esta ocasión Martins sí acertó y embocó el rechazo al fondo de la portería.

Los locales volvieron a golpear nada más regresar del vestuario, sin dar tiempo a que los cambios españoles echaran la primera carrera. Una buena triangulación lusa la remató desde dentro del área Postiga de tacón, pero el que introdujo el esférico en la portería de España fue Sergio Ramos en su intento de despejarlo.

El segundo tanto cristalizó la sensación de que los campeones del mundo no estaban a gusto sobre el campo, casi que no estaban motivados para disputarlo. Entre la intensidad mostrada por una selección y otra distó un abismo, y se evidenció de manera cruel para Ramos y Capdevilla en el tercer tanto portugués. El lateral de Camas falló estrepitosamente en un saque de meta de Eduardo que dio origen a la jugada en cuestión, y el defensa del Villarreal habilitó a Postiga en el momento de rematar para convertir el tanto.

Del Bosque siguió introduciendo cambios, e incluso probó fortuna con una delantera inédita como la formada por Torres y Llorente, pero no hubo reacción, ni gol de la honra. De hecho, fue Almeida el que amplío el marcador en el descuento. Un doloroso resultado, pero justo por los méritos de unos y otros. España cierra un año mágico con un partido para olvidar cuanto antes.

Ficha técnica:
4 - Portugal: Eduardo (Rui Patricio, m.46); Joao Pereira, Ricardo Carvalho (Pepe, m.46), Bruno Alves, Bosingwa; Carlos Martins (Manuel Fernandes, m.63), Raúl Meireles, Joao Moutinho; Cristiano Ronaldo (Danny, m.46), Nani (Paulo Machado, m.88) y Helder Postiga (Hugo Almeida, m.76).

0 - España: Iker Casillas; Sergio Ramos, Piqué (Marchena, m.46), Puyol (Arbeloa, m.73), Capdevila; Busquets, Xabi Alonso (Llorente, m.58); Xavi (Cesc, m.46), Iniesta (Cazorla, m.58), Villa (Torres, m.46); y Silva.

Goles: 1-0, M.45: Carlos Martins. 2-0, M.23: Hélder Postiga. 3-0, M.68: Hélder Postiga. 4-0, M.94: Hugo Almeida.

Árbitro: Antony Gautier (FRA). Amonestó a Busquets (m.8), Cristiano Ronaldo (m.9) y Cesc Fábregas (m.72).

Incidencias: Partido disputado en el nuevo Estadio da Luz de Lisboa ante unos 25.000 espectadores, entrada muy floja. Los jugadores saltaron al campo con camisetas de la candidatura ibérica para el Mundial de 2018, con las que se fotografiaron, antes de regresar al túnel de vestuarios y volver a salir, ya sí, con la equipación habitual. Iker Casillas y Cristiano Ronaldo, los dos capitanes, leyeron sendos textos de respaldo a la candidatura mundialista.

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