Paraguay dejó escapar la victoria en el descuento en su visita al líder Ecuador (2-2), pero avisó que dará dura pelea en la eliminatoria sudamericana para el mundial de Rusia 2018.
Más que para las matemáticas (la Albirroja quedó tercero) el resultado ante el "Tri" el jueves sirvió de envión anímico a los guaraníes, en la previa ante el monstruo brasileño el martes por la sexta fecha en Asunción.
En el segundo minuto adicionado por el juez uruguayo Daniel Fedorczuk para poner fin al partido, se produjo la jugada en la que el "cerebro" del equipo ecuatoriano, Christian Noboa hizo el pase vertical que dejó solo a Mena frente al portero Justo Villar.
La defensa se había alineado para aplicar la trampa de la posición adelantada pero el asistente Nicolás Tarán dio como válida la jugada.
El goleador trasuntó más alivio que festejo ante la pasividad del línea, a pesar de la trascendencia de la conquista salvadora que hizo estallar de júbilo a los 40.000 espectadores que se dieron cita en el estadio Atahualpa de Quito.
"Ecuador tiene un gran equipo, un gran entrenador y no necesita de ese tipo de ayudas", exteriorizó con malestar el entrenador argentino de la Albirroja, Ramón "Pelado" Díaz.
Los especialistas coincidieron en que Paraguay tuvo los méritos para escamotearle un triunfo en su casa al pretencioso puntero invicto de las eliminatorias pero que una fuerza mayor se lo impidió.
Sin embargo, en la conclusión general, Díaz no estuvo exento de observaciones por los cambios que hizo para contener al impetuoso rival que se fue con todo en busca del empate.
El adiestrador se jugó por el delantero del Espanyol de Barcelona Hernán Pérez para tentar el contragolpe pero el jugador no respondió.
La cuestión que sigue en debate es por qué no ordenó el ingreso del mortífero volante ofensivo del Rácing argentino, Oscar Romero, o del habilidoso "Messi guaraní", Juan Manuel Iturbe, con la misión de administrar el balón ante el asedio rival.
Al parecer el técnico todavía tiene dudas sobre el potencial de jugadores a su disposición, según especialistas.
Todos coinciden en que el estratega logró ensamblar un cuadro potente "dispuesto a competir contra cualquiera".
Descubrió al goleador del Atahualpa, el delantero Darío Lezcano, autor de los dos tantos ante Ecuador, desconocido por los propios paraguayos antes de la eliminatoria y que fue convocado cuando estuvo a punto de fichar por la selección suiza.
Díaz consiguió convencer a "Iturbo" (como lo apodan) para ponerse la casaca albirroja, después de vestir la selección juvenil albiceleste, y le dio la confianza necesaria al volante Rodrigo Rojas y al defensa Bruno Valdez.
Los dos últimos, pertenecientes al Cerro Porteño de Asunción, no se figuraban como números puestos en el combinado habiendo otros experimentados con más roce internacional.
Pero el examen más fuerte se viene el martes. El cuadro albirrojo recibirá a la escuadra brasileña en un partido de altísima temperatura en el estadio Defensores del Chaco de Asunción.
Nadie sabe todavía qué sorpresa puede presentar el "zorro" director técnico rioplatense, un ganador nato a nivel de clubes.
De él se espera todavía mucho más al frente de un equipo "que sigue creciendo y quiere que se lo respete", tal como subrayó el DT en conferencia de prensa el jueves en Quito.
hro/ol
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