Roma, 3 may.- La final de la Copa de Italia, que debía empezar a las 21.00 horas (19.00 gmt), ha comenzado con 45 minutos de retraso debido a los incidentes que se produjeron antes del partido, que provocaron cuatro heridos, uno de ellos muy grave.
Al menos cuatro aficionados del Nápoles resultaron heridos, tres de ellos por disparos de arma, en enfrentamientos en Roma antes de la final.
Tres de los heridos fueron alcanzados por disparos en la calle de Tor di Quinto, en los aledaños del estadio Olímpico de Roma, cuando un grupo de ultras romanos, según los medios, atacaron a los hinchas del Nápoles.
Este hecho provocó que durante unos minutos, los representantes de ambos equipos y de la Lega se planteasen sobre el terreno de juego del estadio Olímpico si era pertinente disputar la final de Copa, por el estado demasiado exaltado de los hinchas del Nápoles.
Ante esta situación, el capitán del equipo de Rafa Benítez, el eslovaco Marek Hamsik, decidió acudir a la curva norte del Olímpico para hablar con los representantes de los aficionados napolitanos más radicales y pedir calma.
Pese a que este gesto provocó que desde ese fondo se lanzasen numerosas bengalas, una de las cuales alcanzó a un bombero, al final se decidió que el encuentro se disputase. Hamsik regresó al vestuario para unirse al resto de sus compañeros y el trofeo de la Copa de Italia volvió al terreno de juego, media hora después de la hora oficial de inicio del partido.
La final ha comenzado a las 21.45 horas con las siguientes alineaciones:
Fiorentina: Neto; Tomovic, Rodríguez, Savic, Pasqual; Aquilani, Pizarro, Vargas; Borja Valero; Joaquín, Ilicic.
Nápoles: Reina; Henrique, Albiol, Fernández, Ghoulam; Inler, Jorginho; Callejón, Hamsik, Insigne; Higuaín.
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