"Si tenemos a todos nuestros jugadores en forma y disponibles, podemos pasar el grupo y por qué no ganar la Copa del Mundo", afirmó el seleccionador neozelandés de Gales, Warren Gatland.
"Encaramos el desafío sin temor, aún sabiendo lo difícil que será la llave. Estamos en una buena dinámica y tenemos la confianza que se necesita. Sabemos que cuando nos preparamos todos juntos durante largo tiempo, podemos jugar un buen rugby. Y vamos a estar listos físicamente", añadió el técnico kiwi, quien dirige a los Dragones desde hace ya cuatro años.
En principio, Gales no es el favorito para quedarse con una de las dos plazas que otorga el grupo para cuartos de final, contra los ingleses que hace cuatro años se preparan puntualmente para esta cita, y los Wallabies, que vienen en ascenso tras ganar el Rugby Championship en agosto pasado.
Los galeses tienen entre ceja y ceja esta cita mundial desde hace cuatro años, después de perder en Nueva Zelanda en semis contra Francia con un ajustado 9-8, después de jugar más de una hora con 14 hombres por la controvertida expulsión de su capitán
Sam Warburton.
De aquella gesta en tierra maorí los Dragones conservaron su dinámica para reinar dos años seguidos en Europa, con Grand Slam en 2012, para luego ceder en 2014 el trono a los irlandeses.
Algunos especialistas han marcado que ciertos problemas de contrato con sus estrellas de selección, que llevó al exilio a algunos de ellos, y un descenso del rendimiento deportivo han minado el poderío de los galeses en los últimos tiempos (terceros en el Seis Naciones-2015).
En su recta final de preparación, los compañeros del fullback Leigh Halfpenny parecen ganar en fuerza, después de una derrota contra Irlanda (21-35) a inicios de agosto que fue vengada una semana después con un plan de juego más bien básico -conquista, defensa, juego de pie- en Dublín (16-10).
Con este plan, los galeses intentarán llegar por primera vez en su historia a la gran final de una Copa del Mundo, tras ser semifinalista en la primera edición mundialista de Nueva Zelanda-1987 y hace cuatro años en esa misma tierra.
Gatland, privado del centro Jonathan Davies (rodilla), ha decidido dejar de lado tres jugadores experimentados como el apertura James Hook, el medioscrum Mike Phillips y el hooker Richard Hibbard para apostar a la sangre joven del ala George North y parte de la banda de esos chicos que deslumbraron en 2011 y ahora pueden convertirse en un verdadero peligro para todos los gigantes.
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