Grecia, un calco de 2004

Juan José Lahuerta

Gdynia (Polonia), 19 jun.- Llegó a la Eurocopa sin hacer ruido y hasta ahora casi no ha llamado la atención. Grecia ha dado pasos de gigante desde el silencio, hasta hacer ruido con su pase a cuartos de final, donde se enfrentará a Alemania. Recuerda a la selección de 2004 que se llevó el título en Portugal. Va despacio, pero recta en el camino.

Los aires cambian en el conjunto heleno y hoy parece que Grecia está en el centro mediático. Por primera vez, el entrenamiento del equipo que entrena el portugués Fernando Santos parecía estar en una gran competición. En Legionowo, donde se ofrecen las conferencias de prensa, muchos periodistas alemanes e internacionales llenaron una sala acostumbrada a tener demasiados espacios libres.

Las sensaciones y el camino de la Grecia de 2004 fue similar. Era una selección invisible que fue dejando cadáveres en el camino hasta llevarse el título pasando en la final por encima de la anfitriona Portugal. Equipos como España (en la fase de grupos), Francia o la República Checa quedaron atrás hasta el momento de levantar la Copa. En ese instante, triunfó el fútbol defensivo.

Es el mismo estilo que ocho años después ha sorprendido en la fase de grupos hasta plantarse en cuartos con victorias sorprendentes ante combinados como el de Rusia, que estaba destinada a ser el líder del grupo A. El equipo de Advocaat, como otros en el pasado, fueron pisoteados por un sistema que a nadie gusta pero que es muy efectivo. Defensa, contragolpe y a sujetar con todo un equipo un posible gol.

Ahora llega Alemania, el todopoderoso equipo de Joachim Löw. En la misma eliminatoria, en 2004, cayó la Francia de Zinedine Zidane. Lo hizo por el resultado preferido de los griegos: 0-1, con un tanto de Angelos Charisteas. El mismo marcador se repitió después en las semifinales y en la final. No hace falta más.

Y no hay miedo a los alemanes. Es el espíritu de Grecia, que no teme a nadie. "¿Hubiese preferido otro rival, posiblemente Portugal? "No, estamos entre los ocho mejores equipos de Europa y no tenemos preferencias. Ya logramos nuestra primera meta y no estamos preocupados por lo que pase después", dijo hoy Giorgos Samaras.

El barbudo jugador del Celtic de Glasgow quiso apartar cualquier parecido con el equipo campeón de 2004. Entonces, nadie apostaba por Grecia y los jugadores que ganaron la Eurocopa siempre andaban con pies de plomo, como Samaras: "No comparemos a este equipo con el otro", avisó.

El defensa central Kiryakos Papadopoulus escuchaba las palabras de su compañero y cambió un poco el discurso haciéndolo más esperanzador: "Ahora no tenemos nada que perder. Logramos lo que nos habíamos propuesto, clasificarnos para los cuartos de final. Nos enfrentaremos a los mejores equipos del torneo, vamos a darlo todo y espero que podemos seguir adelante".

Es casi imposible, nadie podría apostar por una derrota alemana, que lo ha ganado todo y avanza como una maquina precisa hacia la final. Y enfrente, apenas parece haber obstáculos que los frenen. Los griegos se han puesto delante, en silencio, callados, como en 2004. Son un calco, una repetición. "Creo que Alemania no nos tomará a la ligera. Quizás en algún rincón de su mente están un poco asustados" avisó Papadopoulus. Ojo a Grecia.