En una industria como la del fútbol español no resulta sencillo cifrar las pérdidas que ha generado la pandemia del coronavirus. Pero el "Límite de Coste de Plantilla Deportiva", que impone un tope a lo que pueden gastar los clubes de Primera y Segunda división en cada temporada, ofrece una pista sobre las previsiones de LaLiga respecto a lo que pueden ganar los equipos en la temporada 2020-2021. La caída respecto a la temporada pasada alcanza los 700 millones de euros, según un informe de LaLiga, que fija en 2.300 millones la máxima inversión que pueden acometer los clubes en conjunto. Si la temporada 2019-2020 no se hubiera reanudado en junio, las pérdidas podrían haber alcanzado los 900 millones de euros.
Javier Tebas, presidente de LaLiga, ha advertido que los clubes deben a sus plantillas "unos 490 millones de euros" para dar por terminada la temporada. Los desequilibrios se deben principalmente a la caída de los ingresos por la venta de entradas, que hubieran representado un 45% de las ganancias de la temporada. En algunas categorías inferiores se permite la presencia de hasta 1.000 personas en los estadios, mientras que en Primera y Segunda división los encuentros siguen celebrándose sin público. Lo más lógico, según Tebas, es reducir la masa salarial de cada club para reducir las pérdidas.
La falta de liquidez en el mercado de fichajes se ha vuelto un agravante. Gonzalo Cabeza, periodista deportivo y presentador del podcast 'El móvil de Mendes', definió la situación de los jugadores con contrato como "complicada". "Hay que pagar lo que está firmado", afirma. "Ha habido buena voluntad en muchos casos, han sido notables las reducciones de salarios de los jugadores, que más o menos han entendido que la supervivencia pasaba también por bajarse los sueldos".
Como solución, las inversiones en fichajes han alcanzado unos 438 millones en este último periodo, un 66% menos comparado con los 1.291 millones del verano de 2019. Los derechos televisivos se han mantenido estables a lo largo de la crisis, un alivio para muchas asociaciones deportivas, pero las que dependen de los patrocinios y el aforo en los partidos han sufrido daños mucho más graves. "Se podría mirar si los equipos estaban a la altura antes", dice Cabeza, "pero es imposible pensar que las cuentas iban a cuadrar si se cortan varias vías de ingreso"
El club más afectado es el Barcelona, que se encuentra inmerso en negociaciones con la plantilla para reducir el salario de sus jugadores. A falta de un presidente, la comisión gestora que dirige Carles Tusquets calcula que hace falta un recorte de 190 millones de euros, dado que la masa salarial representa un 70% del presupuesto total. Los jugadores han rechazado rotundamente estos términos, al igual que las propuestas de un pago en plazos a 10 años. Tusquets, que tiene una trayectoria de 42 años en el Barça, ha advertido que el club se enfrenta a una caída de ingresos de al menos 300 millones de euros si los estadios no se abren al público. Víctor Font, precandidato preferido a la presidencia del Barça, asegura que el club se encuentra en la "quiebra económica y moral".
La lista de equipos con los topes salariales más altos la continúan el Real Madrid, que dispone de 172 millones menos para gastar que la temporada pasada, y el Atlético de Madrid, que perderá 95 millones de lo que puede gastar. Ambas cifras se calculan en un 27% menos que el límite que les impusieron el año pasado, y aunque se trate de más dinero, no son los casos más dramáticos. El Valencia resta más de 73 millones a su tope salarial, un 42% menos que lo que tenía en la temporada, que cerró con 8 millones de euros en déficit. Para equilibrar las cuentas, ha vendido nueve jugadores en el mercado de fichajes sin realizar compras, por lo que esperan ingresar 41 millones de euros. Incluso así, prevé terminar la próxima temporada con 26 millones en pérdidas.
Como expresa Cabeza, "antes de la pandemia ya había clubes con dificultades sin importar el límite salarial, y habría que ver si esta medida era tan eficaz, si a todos los clubes recibían un trato igual y si no se hacía la vista gorda con nada". Algunos equipos "siempre necesitan vender jugadores, sin importar sus resultados deportivos" debido a una gestión deficiente antes de la pandemia. Cabeza pone como ejemplo al Valencia, cuya ausencia en la Champions representa "un problema económico de primer orden", y al Atlético.
De manera parecida a tantos otros sectores de la economía, el fútbol español ve con esperanza los avances de la vacuna contra la Covid-19. El 'derbi andaluz' entre el Betis y el Sevilla inaugurará el regreso de LaLiga, como ha asegurado Tebas, aunque los aficionados tendrán que conformarse con verlo en sus pantallas hasta que puedan contar con alguna de las fórmulas que han anunciado diferentes compañías para inmunizar a la población. El público, que es "la esencia del fútbol" según el presidente de la patronal, puede contar con que encontrará las puertas de los estadios abiertos el día que la vacuna esté disponible para todos.
¿cÓMO FUNCIONA EL TECHO SALARIAL?
- Con el nombre oficial de "Límite de Coste de Plantilla Deportiva", el techo salarial es la cantidad máxima que puede gastar cada club de Primera y Segunda División en los salarios de su plantilla, incluyendo jugadores, entrenador, segundo entrenador, preparador físico, el filial, la cantera y otras secciones. Se calcula restando los gastos estructurales (como infraestructura e instalaciones de entrenamiento) y pagos previstos de deudas a los ingresos del club, que incluye las entradas, las licencias televisivas, comerciales, entre otros.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios