Hamilton echa el resto por el Mundial mientras Sainz (6º) y Alonso (10º) danzan bajo la lluvia

Hay Mundial y hay espectáculo en la Fórmula 1. El Gran Premio de Brasil así lo puso de manifiesto cuando las condiciones de lluvia no fueron extremas. Dos banderas rojas e innumerables coches de seguridad torpedearon el transcurso de una carrera apta solo para pilotos de nivel. Hamilton se aferró al primer puesto y peleará por el Mundial hasta el final mientras los españoles dieron un recital. Sainz fue sexto y Alonso décimo recuperándose de un trompo en los últimos giros. Fue una carrera para no olvidar con un 'pit lane' aplaudiendo al completo a un Felipe Massa entre lágrimas. 0001f3c1 POINTS SCORERS 0001f3c1

1 HAM

2 ROS

3 VES

4 PER

5 VET

6 SAI

7 HUL

8 RIC

9 NAS

10 ALO#BrazilGP 0001f1e70001f1f7 pic.twitter.com/GfPlLEcPFl2014 Formula 1 (@F1) 13 de noviembre de 2016

El que avisa no es traidor. Romain Grosjean ni llegó a la línea de meta con su Haas. El francés sufrió un problema de motor en la vuelta de formación, algo que unido al aguacero le hizo estamparse contra el muro. El agua no iba a ser buena consejera en Brasil. Los pilotos ya lo sabían antes de una salida sin emoción ni adelantamientos, una salida a la cola del 'safety car'.

Siete vueltas. Siete vueltas fue lo que tardó el coche de seguridad en apagar las luces y relanzar un Gran Premio que ya comenzó con 10 minutos de retraso por la lluvia.

Hamilton defendió su posición con Rosberg sin problemas, mientras que Verstappen fue el más listo de la clase (no es la primera vez), adelantando en la 'primera curva' a un adormilado Raikkonen. Quizás la preocupación por las gotas de agua le impidió cubrir su interior.

Alonso salía noveno y Sainz décimo cuarto por el más que prematuro abandono de Grosjean. El asturiano sufrió un pequeño trompo en el trazado mojado pero se repuso como bicampeón mundial que es. 

Palmer abrió la veda de las estrategias entrando a poner neumáticos intermedios. La pista estaba mojada, el de Renault se arriesgó, y como un rebaño de ovejas la mitad de la parrilla entró al 'pit lane' a cambiar de ruedas, entre ellos Fernando Alonso.

El accidente de Ericsson rompiendo la suspensión y quedándose parado en la entrada al 'pit lane' puso de manifiesto que aquello había sido un error. 

En la vuelta 13 'el safety car' volvió a comandar la carrera mientras los operarios apartaban el coche de Ericsson. Ricciardo cometió el error de entrar a 'boxes' cuando el 'pit lane' estaba cerrado, por lo que obtendría una penalización de 5 segundos una vez reanudada la prueba. Una reanudación que no duró mucho. Raikkonen se estrella en la recta de meta

El agua caía del cielo sin cesar. Los previsiones meteorológicas de los equipos eran peores y lo inevitable pasó. Raikkonen protagonizó un accidente en la recta de meta que pudo terminar en tragedia.

El finlandés perdió el control del coche, se fue hacia la derecha y finalizó en el muro de la izquierda mientras su alerón salía disparado por los aires. 

El alerón chocó con Hulkenberg y menos mal que 'tan solo' se le enganchó en el morro. La suerte estuvo con él, y para no tener que seguir apelando a la suerte, Dirección de Carrera paró el Gran Premio con una bandera roja.Accidente de Kimi Raikkonen provocó interrupción del #GPdeBrasil de F1 https://t.co/RzEyWI4tZG Ferrari pic.twitter.com/efmumQtcGO2014 MVS Veracruz (@VeracruzMVS) 13 de noviembre de 2016

Hamilton seguía líder. Rosberg y Verstappen completaban el podio, mientras los españoles aguantaban el tipo. Sainz era sexto y Alonso décimo. Las quejas de los pilotos no se escuchan

Tiempo de decisiones de los comisarios. El monoplaza de Raikkonen y sus respectivos restos fueron retirados de la pista. Seguía lloviendo, pero los pilotos querían continuar.

Sobre todo un Hamilton que sabía que perdería casi todas su opciones de Mundial si la carrera finalizaba así. Los pilotos recibirían la mitad de los puntos y a Rosberg le bastaría con ser quinto en Abu Dabi para ser campeón. 

Misma rutina y mismo fracaso. El 'safety car' presidió la carrera en la vuelta 21, pero su aventura duró 8 vueltas más. La bandera roja ondeaba de nuevo en Interlagos. Lambiase: 'Bandera roja, bandera roja'

Verstappen: 'La pista está mucho mejor que antes'

Lambiase: 'Conflicto de intereses entre pilotos...' pic.twitter.com/PeFgU9hYVm2014 MrAlexF1 (@MrAlexF1) 13 de noviembre de 2016

Esta vez sin el consentimiento de los pilotos. Los mensajes por radio delataban que la pista estaba para correr aunque ya se sabe que la decisión que prevalece es la de los comisarios. Con unas perspectivas de no completar los 71 giros establecidos, Sainz y Alonso se iban al segundo parón quinto y décimo, respectivamente. Se podía soñar. Y al fin... ¡El espectáculo!

La carrera se reanudó a las 19:03 horas españolas y cinco vueltas más tarde el coche de seguridad dijo adiós como telonero del show 2.0 de Verstappen. Como en el inicio de carrera, el neerlandés atacó a su rival más cercano, adelantando esta vez a Rosberg. Una 'pasada' que ponía en jaque el Mundial del alemán. 

Además, vueltas más tarde, demostraba su talento corrigiendo un doble hachazo con sus manos que cerca estvude de llevarle directo contra el muro. No solo eso, sino que aguantó el embite con Rosberg para seguir siendo segundo. ¡¡¡Mamá mía!!! Las manitas de Max Verstappen!!! 0001f450 Espectacular el control del coche cuando ya lo veíamos en el muro. pic.twitter.com/UHRWVSnKq02014 Fórmuleros#14 (@AtopeF1) 13 de noviembre de 2016

Los Red Bull optaron por poner intermedios. Ricciardo voló en la pista en primera instancia y Verstappen hizo lo propio entrando en 'boxes'. Rosberg recuperaba su segundo puesto y Red Bull arriesgaba con un futuro lleno de lluvia.

Sainz no paraba de ascender posiciones (4º) y Alonso protagonizó un duelo por Vettel por la séptima plaza, pero el Ferrari del alemán era demasiado para el McLaren. 

La coherencia llegaba a la pista, pero el 'safety car' volvió ipso facto cuando Felipe Massa, el piloto brasileño que disputaba su última carrera en casa, sufrió un accidente a la entrada del 'pit lane'. Hamilton gana y Massa emociona al mundo

Fue la imagen del fin de semana. Felipe Masa, con una bandera de Brasil a la espalda, llorando y siendo aclamado por los aficionados. Massa disputaba su último Gran Premio Brasil y no pudo acabarlo, pero recibió un homenaje para la historia. Todas las escuderías rivales le aplaudieron en su camino por el 'pit lane'. Espectacular. Aplausos a Massa de todo el 'pit lane' tras abandonar en Brasil. Su última carrera en casa #BrazilGPpic.twitter.com/OdSKgF36pt2014 Diego Mariño (@Dmarinorr) 13 de noviembre de 2016

En la vuelta 54 se relanzó la carrera y lo hizo con pésimas noticias para Fernando Alonso. El asturiano hizo un trompo, logró devolver el monoplaza al asfalto, pero se puso a la cola de la clasificación.

Las malas noticias del asturiano se extendieron al equipo Red Bull. La estrategia de los intermedios salió cara. Verstappen y Ricciardo fueron obligados a volver a 'boxes' para cambiar las gomas y el podio parecía esfumarse. Rosberg, que tanto había sufrido y que pedía la hora por la radio, se haría con la segunda plaza reduciendo los daños de la victoria de Hamilton. 

Capítulo aparte para el carrerón de Carlos Sainz. Sexto, con una conducción impoluta y presionando a Checo Pérez hasta agotar el tope de opciones de podio, hasta que reapareció en escena Verstappen, una vez más. 

El de Red Bull puso la guinda a su show remontando en 15 vueltas desde fuera de los puntos hasta el tercer escalón del podio. 

Al final, un sexto puesto para Sainz y, atención, un décimo para Alonso puntuando tras remontar desde la última plaza. Abu Dabi dictará sentencia en un Mundial en el que Hamilton está a 12 puntos de Rosberg después de su triunfo. 

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